Tráete las facturas que te voy a ayudar a pagarlas, le dijo el Gobierno a los ayuntamientos. Pues toma, aquí tienes, "5.000 ayuntamientos presentaron cientos de miles de facturas que dormían en los cajones", cuenta El Mundo. Pedro J. está asustado. "El despilfarro y la mala gestión se extiende por toda la geografía nacional", no solo en el PSOE, "la pregunta que se hace hoy cualquier ciudadano es cómo ha sido posible tanta irresponsabilidad". Como "desgraciadamente nadie puede llevar a los tribunales a quienes dilapidaron los recursos públicos", Pedro J. propone cambiar el Código Penal y "tipificar como delito estas conductas" y enchironarlos a todos.
Jiménez Losantos se conforma con mandar al trullo a Montoro, que lo tiene muy enfadado con el frenesí que le ha entrado con los impuestos. "Mientras no se frene el despilfarro de dinero público (...) toda subida de impuestos es ilegítima y debería ser ilegal". Y es que no se explica lo que le ha pasado al ministro de Hacienda, cuyo "argumento para subir impuestos es grotescamente socialista". Hala, toma bofetón.
El País está disfrutando como un enano con lo del copago. "El PP apuesta por medicinas más caras en función de la renta" y "cada día que pasa está más claro que después de las elecciones andaluzas van a pasar muchas cosas en España", vaticina misterioso Carlos E. Cué. Lourdes Lucio se pitorrea del pobrecillo Arenas, que "ayer sufrió una ahogadilla en su plácido nado boca arriba" con la que se montó con el tema sanitario. "Los socialistas andaluces están muy cómodos en este debate", dice con recochineo.
La Gaceta también da cuenta de que "el copago farmacéutico se cuela en la agenda de los populares antes de las andaluzas", mecachis en la mar. Esther Jaén le manda un suave, casi acariciante, mensaje a Arenas, cuya "estrategia pasa por repasar, día tras día, las presuntas fechorías y corruptelas" del PSOE "para que los votantes no lo olviden". Eso está fenómeno, pero "no les conviene que se les relaje uno solo de los votantes y por eso deben andar también tratando de aquilatar hasta la última de las papeletas".
Y encima, ABC no tiene hoy un ERE que echarle a la boca a Arenas y le pone los cuernos volcándose en el "solvente" Montoro, que ayer llegó a un acuerdo consigo mismo. "No hubo titubeos" y "fue contundente al negar una eventual subida de los impuestos especiales", ni el IRPF, ni el IVA ni nada, sino que va a sacar las perras –una calderilla de 5.000 millones de euros- reduciendo el gasto de la Administración central, "no del sacrificio de las capas más débiles". Ya. Deseamos fervientemente que ABC no se lo tenga que comer con patatas. Carlos Herrera no oyó lo que oyó ABC y dice que va a subir todo, la gasolina, el tabaco, el alcohol y que nos esperan días horribles. "Pero nada es para siempre. Las reformas marianistas no tienen mal aspecto", que se lo han dicho unos "miembros sensatos de la oposición socialista" que él conoce y que le han contado que esas mismas medidas "hubieran sido dispuestas por ellos mismos en el caso de haber ganado". Nombres, Carlos, queremos nombres.
En La Razón, a Agustín de Grado le está empezando a tocar las narices el PP. "Volverán a meternos la mano en el bolsillo. Prepárense para pagar una vez demostrado que bajar los impuestos nunca fue de izquierdas y subirlos ha dejado de ser una anatema para la derecha". Le "irrita que se nos esté preparando para otra vuelta de tuerca en la presión fiscal" mientras esperamos pacientemente el "gran ajuste" en la administración. "Los políticos de todos los partidos prefieren meter la mano en nuestra cartera a que los demás podamos hurgar en la suya". Oye, ni Rosa Díez, que "se queda sola en su propuesta de reestructurar el Estado" y "abusa de la demagogia", lo hubiera expresado mejor.