El pasado jueves, la Policía Nacional asestaba un golpe mortal a uno de los clanes mafiosos más buscado de Europa. En su historial, más de veinte asesinatos en Serbia y Holanda, entre ellos, el del primer ministro democrático desde 2000 del país balcánico, Zoran Djindjic, que fue el encargado de entregar a Slobodan Milosevic al tribunal de La Haya.
Este lunes, en el Complejo Policial de Canillas, en Madrid, buen parte de la cúpula del ministerio de Interior se congregó en la exposición del material incautado a este grupo mafioso, conocido como Clan Zemun, y cuyos miembros pertenecieron durante la guerra de los Balcanes a la estructura paramilitar Los Tigres de Arkan.
El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, valoró la importancia de estas detenciones en el ámbito internacional. "Esta operación policial tramite a Europa y el mundo que España tiene una buena Policía. Y en estos tiempos, uno de los elementos que más confianza genera es que España sea un país seguro", dijo
"España tiene una Policía competente y profesional. Las mafias no pueden esperar que España sea un país fácil para ellas. Hoy la Policía y la Guardia Civil están con la guardia muy alta, no lo van a tener fácil", añadió.
Tras esto, resaltó la gran repercusión que ha tenido la caída de este clan en los periódicos y televisiones de Serbia, abriendo periódicos y noticiarios de televisión, algo que ha confirmado la embajadora de Serbia en España, Jela Bacovic, presente en el acto.
El titular de Interior destacó asimismo la "profesionalidad criminal" de los detenidos y puso como ejemplo no sólo que lleven en búsqueda y captura por la Interpol y múltiples policías europeas durante casi una década, sino el hecho de que "en los tres días que llevan en prisión no han comido ni bebido para que no se les pueda suministrar ningún tipo de suero de la verdad o producto que les fuerce a una declaración autoinculpatoria".
Eso sí, posteriormente, a preguntas de los medios de comunicación dejó claro que los temores de los mafiosos serbios son infundados, ya que ningún Cuerpo de Seguridad del Estado utiliza ese tipo de métodos para conseguir declaraciones.