Una mujer colombiana de 28 años, Patricia Sánchez Herreros, fue raptada cuando salía de su coche en Barajas y rescatada gracias a su teléfono móvil, con el que pudo contactar con su marido y con su jefe, lo que permitió su liberación.
En torno a las 9:30 del miércoles, Patricia aparcó su Ford Focus en la calle Riaño de Barajas, cerca de los muelles de carga del aeropuerto. Cuando se bajaba del vehículo fue abordada por un encapuchado, que la obligó a meterse en el maletero pero no le quitó el teléfono móvil.
La víctima del secuestro se introdujo en el maletero sin atar y con el bolso incluido. Cuando el delincuente arrancó el coche, la mujer avisó a su marido y telefoneó a su jefe desde su BlackBerry, con el que minutos antes había conversado a través del chat. Según informa El País, también marcó el 091 y contactó con la comisaría de Torrejón de Ardoz, cuyos agentes fueron alertados del secuestro.
Esta versión contradice a la de ABC, que explica que la Policía Nacional alertó al jefe de Patricia de que dijera a la mujer que llamase ella a las fuerzas de seguridad para localizar la señal del teléfono, pero que no lo hizo en ningún momento.
Según cuenta el diario de Vocento, Patricia volvió a llamar a su marido y a su jefe y aportó el número de la matrícula de su vehículo.
El viaje se prolongó durante una hora y cuarto. En torno a las diez y media, el secuestrador aparcó el vehículo en la avenida de la Constitución de Torrejón de Ardoz, abrió el maletero y le pidió todas las tarjetas bancarias y su código secreto. La mujer le proporcionó todo y el secuestrador la volvió a encerrar y se dirigió a un cajero, del que sacó 450 euros.
Un radiopatrulla le detectó a las once de la mañana en la avenida de las Fronteras de Torrejón, cuando se dirigía en sentido a Zaragoza por la autovía de Barcelona. Al descubrir a la Policía, el secuestrador intentó huir pero colisionó a la altura del kilómetro 23. Se bajó del vehículo y escapó a la carrera. Se dejó caer por un terraplén y cruzó a pie la carretera pese al tráfico que había en ese momento, consiguiendo huir tras esquivar varios coches. La policía le perdió la pista, pese a que se desplazaron a esa zona varios patrullas -incluso de la Guardia Civil-.
Los agentes abrieron el maletero y encontraron a la víctima. Comprobaron que no tenía signos de violencia, pero fue trasladada al hospital de Torrejón de Ardoz para someterse a una exploración. Según cuenta Patricia, el delincuente era "un tipo fuerte y español", que llevaba la cara tapada. La investigación policial todavía sigue abierta.