El director adjunto de La Vanguardia sigue la estela de los políticos de CiU y ha vuelto a increpar al resto de españoles resaltando de nuevo el victimismo del nacionalismo catalán.
De este modo, Enric Juliana utilizó como pretexto los recortes que se están produciendo en Cataluña para arremeter contra los españoles de fuera de Cataluña. Así, en un debate en 8TV el periodista afirmó que "solo en Cataluña se afronta de forma cruda" y añadió que "mientras aquí estamos discutiendo sobre qué ha de pasar con los médicos, en una parte de España están tocando la guitarra en estos momentos". Hablaba en clara referencia a la boda de la Duquesa de Alba-
Como si sólo en Cataluña se estuvieran produciendo planes de ajuste, el director adjunto de La Vanguardia aseguró que "En estos momentos, la discusión cruda sobre el recorte en los servicios sociales está teniendo lugar en Cataluña. Y aquí hay dos posibilidades: o nosotros somos más papistas que el Papa [con los recortes], o bien los otros se están comportando de una manera irresponsable, pero alguna cosa no cuadra. El modelo se está abordando de forma asimétrica. [...] ¿Por qué solo en Cataluña se está afrontando de forma cruda, con tensión política, incluso con manifestaciones en la calle, la cuestión del estado social, la superviviencia del estado social, mientras en otros lugares se está tocando la guitarra?".
Tal y como recoge La Voz de Barcelona, Juliana tuvo durante el debate una especial obsesión ante una victoria del PP el próximo 20-N e incluso lanzó varias advertencias al portavoz de la Generalidad, Francesc Homs, presente en el debate. "El hecho de que se esté retrasando en otros lugares de España la discusión pública sobre el recorte del estado social tendrá consecuencias de orden administrativo, políticas. Esto no es una broma. [...] Hay algunas administraciones territoriales españolas que en este momento pueden estar a medio paso de la suspensión de pagos, esperando a que el día 21 se articule una nueva mayoría política. ¿Qué consecuencias puede tener esto? [...] Se está llevando a término una operación colosal de desprestigio del estado autonómico que sirva de coartada para la recentralización del país a partir del mes de noviembre o diciembre; esto conviene saberlo para que, cuando nos lo encontremos, no nos coja por sorpresa. [Y hay un] intento de deslegitimar la autonomía catalana", dijo.
Además, siguió utilizando el ya gastado argumento de la campaña contra Cataluña en el resto de España. En este sentido, Juliana aseguraba que "estoy harto de leer en la prensa de Madrid de que, ante una parte importante de la sociedad española, los catalanes nos lo gastamos todo en vino y lengua catalana, y martirizamos ahora a los enfermos de riñón. Este país, me refiero a España, en estos momentos empieza a tener elementos de carácter manicomial. Conviene saberlo porque viene una nueva mayoría política y los meses de diciembre y enero serán para España meses muy duros.
Siguió su sesuda argumentación afirmando que "a veces, en Cataluña actuamos, pensamos y tomamos decisiones como si España no existiese. España existe y tendremos noticia de ello el día 20 de noviembre a las 10 de la noche. Y, cuidado, que la fiesta no la acabemos pagando nosotros. [...] En España se tendrán que tomar una serie de medidas que no se han tomado hasta ahora y hará falta que existan los elementos emocionales, ideológicos y políticos que legitimen estas medidas. Y eso se hará sobre las costillas de los catalanes. La Casa de Alba toca la guitarra, no porque no sepan lo que está pasando, [...] sino porque ya dan por descontado lo que pasará el 20 de noviembre a las 10 de la noche. [...] Se ha de tener muy presente, no solo la existencia de una nueva mayoría política seguramente el día 20, sino un estado de ánimo en la sociedad español".