Los quejidos de "El Follonero" en 'El Mundo' y la compasión de César Vidal por Rajoy

En El Mundo, un lírico y lacrimógeno Zabala de la Serna cuenta que los tres toreros –José Tomás, Serafín Marín y José Mora- echaron el cierre "con la tristeza en la mirada y los ojos clavados en la arena, anclados en el pasado sin vistas al futuro". Son "vidas desgarradas en jirones por la política nazionalista" mientras "20.000 almas clamaban por la libertad perdida, castrada, amputada". Entre los columnistas que lloran el adiós a los toros en Cataluña destaca David Gistau, que se encontró con "El Follonero", el de La Sexta. Resulta que estaba en la plaza y, contagiado por el desánimo general, le confesó que "no le gusta que se prohíba nada" y le hizo una compungida confesión: "Tú no sabes lo difícil que es ser catalán". Como te oigan en tu cadena, ay como te oigan, Follonero.

Jiménez Losantos está que trina con los sindicatos SPP y SUP a cuenta del Faisán. "Ahora resulta que el chivatazo lo dio Carlos G., que investigó y halló a los imputados por Ruz (...) ¿A quién le importa si el chivatazo lo dio Ballesteros o Germán? Lo importante es quién dio a su policía la orden de avisar a ETA para escapar de la policía. Y ambos sindicatos saben que sólo uno pudo darla".

Ya en campaña, Rajoy está que lo tira, todo el fin de semana hablando prometiendo, haciendo propuestas, saliendo en El País. Debe estar agotado. Dice que va a "inhabilitar a los despilfarradores". Gallardón debe estar temblando. Mientras, Rubalcaba, el pobre, como nada le da resultado vuelve al "discurso del miedo". Que viene la derecha, que viene, que viene, nos quitará las pensiones, y la sanidad, etc, etc, etc...

La Gaceta le ha cogido el gusto a lo de "señor Rubalcaba" y ya se refiere así al candidato. Carlos Dávila también está furioso con lo de los toros y advierte: "Vamos a defender la superviviencia de una tradición que sólo molesta a los que quieren borrar de Cataluña cualquier impronta de España. Estamos con la Fiesta Nacional, lo decimos hoy. También en Cataluña". Pues ya puede gritar hasta desgañitarse, señor Dávila.

El periódico de Intereconomía sale en defensa de Jiménez Losantos y la propia La Gaceta, a quienes puso a caldo La Vanguardia aprovechando una entrevista a Jorge Fernández Díez. "Olvida su función informativa y cede terreno al insulto y al enfrentamiento (...) periodismo pobre que deja en evidencia su claro ramalazo independentista" –tan contentos estarán ellos de que se les note-. "¿Qué se puede esperar de un medio dócil a la omertá del nacionalismo que se prestaba a los editoriales conjuntos dictados por el presidente Montilla?".

El País dice, como con guasa, que el cierre de La Monumental "revistió caracteres de psicodrama colectivo". Y en cuanto a la política, tras sobar un poco el lomo a Rajoy ayer hoy intuye que "Rajoy sugiere futuros recortes en el empleo público". Qué linces. Mientras, a Zapatero le dedican una doble página para despedir "la legislatura del sobresalto". Aizpeolea cree que "si hubiera dimitido" la noche famosa de los recortes "hoy sería un icono de la izquierda" porque "ha sido la crisis la que ha podido con Zapatero, no la derecha política y mediática". En el editorial, El País advierte a Rubalcaba contra sus aviesas intenciones. "Su esperanza de gobernar va unida a la hipótesis de una alianza múltiple", es decir, pactos por aquí, por allá y por acullá, con todo quisqui para conseguir el poder. "A la vista de los efectos de la política de alianzas de Zapatero nada favorecería menos a los objetivos anticrisis que una subasta de concesiones", majete, le viene a decir. Y además, "podría reforzar el voto al PP para que pueda gobernar sin ellos". Así que ándate al loro, señor Rubalcaba.

En La Razón, César Vidal se compadece de Rajoy, y con razón. "La suerte que le espera de ganar las elecciones no se la desearía yo ni a mis peores enemigos. Tendrá que neutralizar a la izquierda montaraz, frenar a los nacionalistas y sobre todo, convencer a la UE de que las cosas han cambiado tras ZP". Ahí es nada, pobre Rajoy, yo tampoco le envidio.

Tras la ración diaria de las maravillas de Rajoy –"aumentará el control en las subvenciones, acabará con la impunidad de los políticos que gestionen mal, revisará el modelo autonómico"- el periódico de Planeta le hace una necrológica a Zapatero. "El brillo de su mirada ha ido apagándose" y está "dolido con los suyos y con la ideología pisoteada" porque "en este tiempo, Zapatero se ha comido sapos y culebras". Sniff.

A ABC no se le pasa el cabreo y está menos por la poesía. "Ni cuando ha hecho lo que se le demandaba, Zapatero ha tenido capacidad para gestionar el final de mandato con altura de miras (...) ha logrado, hasta en su última decisión como jefe del Ejecutivo, empeorar" la situación del país. Es que ni el último día le dejan en paz. ¿Es el último día, por cierto?

Pilar Cernuda cuenta algunos cotilleos y uno de ellos me llama la atención. "La gran banca trata de acercarse a codazo limpio a Rajoy". Cuenta Cernuda que cómo será la cosa en estos ambientes que "uno de los que ahora se quiere aproximar" a Rajoy se acercó una vez a Zapatero, cuando todavía mandaba y le dijo: "¿Cómo se te ha ocurrido nombrar a Elena Salgado vicepresidenta económica? Pero si tú sabes mucho más que ella de economía". Cómo es la peña.

Público es el único periódico que pasa olímpicamente de los toros catalanes porque tiene una primicia superimportante. "Aznar lanza una guía para lucrarse con el cambio climático". Cuatro paginitas del ala, le dedica a las "actividades del expresidente". En fin, una fijación es una fijación, oigan, todos tenemos alguna, se nos aparece por las noches, no nos deja dormir. ¿A que da miedo?