Una disputa entre partidarios y detractores de que la Virgen de Tejeda porte peluca en la ofrenda que se celebró el miércoles en Garaballa (Cuenca) obligó el martes a intervenir a una patrulla de la Guardia Civil para calmar los ánimos.
Según han confirmado a Efe fuentes parroquiales del santuario de Nuestra Señora de Tejeda, una patrulla tuvo que intervenir porque se vivieron momentos de tensión en el santuario dado que no había unanimidad a la hora de decidir si la imagen debería llevar o no peluca en la ofrenda y en la procesión.
Las mismas fuentes han indicado que "una minoría", encabezada por la alcaldesa de la localidad, Aurelia Palomares (PP), ha querido "adueñarse" de la Virgen de Tejeda para taparla con una peluca, saltándose la decisión de la Iglesia, que quiere que se prescinda de ella.
Una forma de vestir y procesionar que se decidió, incluso, con una moción en un pleno municipal. En este sentido, la regidora ha explicado a Efe que este asunto se debatió en una sesión plenaria porque los vecinos le habían pedido en reiteradas ocasiones que la imagen debería llevar peluca, además de otros atuendos, por lo que atendió a las demandas de sus vecinos.
"Queremos que se respeten las tradiciones y salga como toda la vida", ha indicado Palomares, quien ha indicado que no quieren que "un cura u otro se la quite según convenga".