Pedro J., el "Killer" de Rajoy y lo que oculta la Izquierda de la matanza de Utoya

Días de sobresaltos en la prensa. Si el viernes Oslo se metía en nuestras vidas con un espectacular coche bomba y noticias sobre un tiroteo en una isla cercana a la capital, este sábado poníamos cara al asesino y conocíamos el horror vivido en aquel tiroteo, que terminó cobrándose 85 víctimas a manos de un mismo asesino. Un desequilibrado fundamentalista cristiano, islamófobo, de derechas y masón.

El horror vivido en la isla de Utoya y el perfil del asesino son los temas principales de los periódicos de este domingo, no sólo en España, sino también fuera de nuestras fronteras.

Sorprende el diario El Mundo, no tanto por el relato de uno de los supervivientes de la matanza, que cuenta cómo el asesino dijo "un policía os va a informar", frase que emplea para el principal titular de su portada, sino más bien por su editorial.

Y sorprende en tanto en cuanto coincide en buena parte con el candidato socialista a La Moncloa, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien insistía en la importancia de que lo sucedido en noruega era "violencia política". En su editorial, el diario de Pedro J. Ramírez, señala que "lo que sí parece claro es que, al margen de la patología que pudiera presentar el asesino, estamos ante un ataque de intencionalidad política."

Sobre esta idea, incide "lo cierto es que resulta preocupante el auge de la ultraderecha en el norte de Europa" y que "son muchas y complejas las razones por las que ideas xenófobas atraen cada vez a más ciudadanos, entre ellas, la falta de realismo con que la centroizquierda ha abordado el problema de la inmigración".

En cuanto a nuestra cita semanal con la carta de Pedro J., hoy habla de Rajoy y los trajes de Camps. En su carta, señala que el líder valenciano del PP, "creía estar alojando al ángel de la guardia y tenía en casa al ángel exterminador". Y es que, según dice Pedro J., "con un liderazgo mucho menos asentado que el que actualmente detenta Rajoy, aquel bisoño jovenzuelo del bigote se zumbó a uno de los únicos presidentes autonómicos que tenía el PP mientras literalmente se fumaba un puro." Se refiere a Cañellas.

Sobre este asunto, Casimiro García-Abadillo nos cuenta hoy que Rajoy le dijo a Camps, "haz lo que tú creas que debes hacer".

Por lo demás, también destaca hoy en el suplemento CRÓNICA la descripción que hace del ex senador del PSOE, Casimiro Curbelo, conocido por su incidente en una céntrica sauna relax de Madrid, la melopea que le llevó a la bronca, y la discusión airada y agresiva con la policía minutos después de ser expulsado del lupanar.

En El País encontramos informaciones similares a las de El Mundo sobre las noticias que llegan de Noruega, incluido una completa infografía en la que se describe los pasos que dio el asesino de Utoya. En en el caso de este periódico lo que más llamativo resulta es el tratamiento de la información de Camps. Pese a haber pedido la dimisión del mandatario popular en varias ocasiones, ahora busca nuevas excusas para cargar contra él. Hoy señala que Camps trató de "aferrarse al poder" hasta que "entendió que sólo iba a prolongar su agonía". Cuentan así lo que entienden que fueron las "últimas horas del presidente valenciano antes de dimitir".

En su principal editorial, titulado "Fanatismo Criminal". Más que de motivaciones sociales habla de "patologías sociales" y pone el énfasis en la falta de preparación de la policía Noruega. "Si el atentado de Oslo es obra de una sola persona, la seguridad noruega queda en entredicho", dice El País.

Seguimos con ABC, donde la foto es para los príncipes de Noruega, Haakon y Mette-Marit, que acudieron con sus hijos a la catedral de Oslo a rezar por las víctimas de la tragedia.

Además, llama la atención en su portada sobre dos entrevistas que lleva en páginas interiores. Una a Alberto Fabra, nuevo presidente de la Comunidad Valenciana y a Francisco Álvarez Cascos, quien considera que "sería irresponsable no pensar en elecciones para octubre".

Como es lógico también y como viene en todos los periódicos en portada, habla de Amy Winehouse que "abraza su destino", dice ABC. "Muere a los 27 años la última diva del blues convertida en icono, plena de talento e incomprensión".

También aquí encontramos en el editorial que "el odio extremo" al "pluralismo y la libertad" es la característica principal del "ultra", personas que "se aferran a los dogmas para ocultar debilidades", dice ABC buscando una explicación a lo sucedido en Noruega. En la información en páginas interiores leemos que "un desequilibrado neonazi siembra el paraíso nórdico con 92 cadáveres".

Además de Noruega, Gürtel y Amy Winehouse, la reaparición de José Tomás en el coso valenciano es noticia de alcance hoy en la prensa y más después de ver cómo el quinto de la tarde le daba un "volteretón" que heló la sangre a los aficionados que abarrotaban la plaza.

Precisamente José Tomás es la fotografía de portada en La Razón, donde son algo más duros con él en el titular: "Entre el triunfo y la tragedia", aludiendo a ese revolcón espectacular que le dio el quinto toro de la tarde. Dice que "el torero cortó una oreja en su reaparición tras negarle el presidente la segunda y recibir una monumental bronca". Quien la recibió fue el presidente, no José Tomás.

En La Razón también entienden que el atentado de ayer fue por motivaciones políticas y hace un editorial "en defensa de la democracia" donde dice que "Noruega y el resto de naciones libres deben preservar sus valores y no flaquear ante quienes amenazan sus libertades".

En Público, leemos en portada "hora y media en el infierno", refiriéndose al tiempo que tardó el asesino en acabar con la vida de 85 personas en la isla de Utoya. "El presunto autor del doble atentado de Noruega, islamófobo y ultraderechista, se hizo pasar por policía y disparó durante 90 minutos en la isla antes de ser detenidos", dice el diario.

En La Gaceta, en cambio, abren su edición de hoy afeándole la conducta a Rubalcaba por decir que "el atentado de Noruega duele más al afectar a su familia política" y también da un apunte más sobre el asesino: "La izquierda oculta que el asesino era masón".