L D (EFE) Ramadan, profesor de francés de alumnos de 10 a 12 años en un centro público ginebrino, fue suspendido temporalmente de sus funciones el pasado 11 de octubre por haber realizado apología de la lapidación como castigo en caso de adulterio. En una carta abierta publicada el pasado 10 de septiembre por el diario francés "Le Monde" y titulada "La charia incomprendida", Ramadan, de nacionalidad suiza, legitimaba este castigo.
El ex fiscal general de Ginebra Bernard Bertossa fue encargado por las autoridades del cantón de realizar la investigación del caso. En su informe, Bertossa afirma que los objetivos de Ramadan "violan el deber de fidelidad que deben respetar los funcionarios respecto al orden constitucional ginebrino". Asimismo, considera que sus funciones como eclesiásticas en el Centro Islámico son incompatibles con el principio laico de la ley sobre la instrucción pública.
En su decisión de despedir al profesor, el Consejo de Estado de Ginebra recuerda que Ramadan ya fue objeto de dos avisos por escrito en 1998 y 2000 para recordarle sus deberes y funciones. El profesor dispone ahora de 30 días para recurrir ante la Comisión de recurso de los enseñantes, lo que ya anunció que haría. Incluso señaló su intención de acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos si fuera necesario.
Hani Ramadan, de origen egipcio, dirige desde 1995 el Centro Islámico de Ginebra y es el nieto de Hassan al-Banna, fundador del movimiento "Hermanos Musulmanes" en Egipto. Este movimiento tienen como objetivo luchar contra la Constitución laica de Egipto de 1922 e instaurar una sociedad islámica. En 1997, las autoridades francesas le prohibieron entrar en su territorio, porque su presencia podía constituir "una amenaza para el orden público" y dos años más tarde fue Egipto el país que dictó una orden similar.
El ex fiscal general de Ginebra Bernard Bertossa fue encargado por las autoridades del cantón de realizar la investigación del caso. En su informe, Bertossa afirma que los objetivos de Ramadan "violan el deber de fidelidad que deben respetar los funcionarios respecto al orden constitucional ginebrino". Asimismo, considera que sus funciones como eclesiásticas en el Centro Islámico son incompatibles con el principio laico de la ley sobre la instrucción pública.
En su decisión de despedir al profesor, el Consejo de Estado de Ginebra recuerda que Ramadan ya fue objeto de dos avisos por escrito en 1998 y 2000 para recordarle sus deberes y funciones. El profesor dispone ahora de 30 días para recurrir ante la Comisión de recurso de los enseñantes, lo que ya anunció que haría. Incluso señaló su intención de acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos si fuera necesario.
Hani Ramadan, de origen egipcio, dirige desde 1995 el Centro Islámico de Ginebra y es el nieto de Hassan al-Banna, fundador del movimiento "Hermanos Musulmanes" en Egipto. Este movimiento tienen como objetivo luchar contra la Constitución laica de Egipto de 1922 e instaurar una sociedad islámica. En 1997, las autoridades francesas le prohibieron entrar en su territorio, porque su presencia podía constituir "una amenaza para el orden público" y dos años más tarde fue Egipto el país que dictó una orden similar.