Técnicos del Fisco analizan el impacto de la crisis en la economía sumergida

Será durante la IX edición del Congreso Nacional que el Cuerpo Especial de Gestión de la Hacienda Pública (GESTHA), celebrará hasta el viernes en Santander. Los Técnicos pondrán sobre la mesa los motivos principales del fraude en España aportando su visión experta sobre las bolsas de economía sumergida más abultadas en el sector inmobiliario, la industria, la agricultura, los servicios y las profesiones liberales.

Además, en el marco de esta reunión nacional, Gestha presentará la nueva edición de su Estudio sobre la Evolución de los Alquileres Sumergidos en España con interesantes datos sobre las rentas ocultas derivadas del arrendamiento de vivienda, así como comparativas regionales con el ranking de las comunidades autónomas que concentran mayor volumen de alquileres sumergidos en nuestro país.

Balance de la Ley Antifraude

Asimismo, los Técnicos de Hacienda realizarán un balance de la Ley de Medidas para la Prevención del Fraude Fiscal desde su puesta en marcha en noviembre de 2006, aportando nuevas medidas e iniciativas para garantizar una lucha eficaz contra la evasión de impuestos y mejorar el control del gasto público y las subvenciones.

Según el Barómetro de Opinión Fiscal presentado este año, el 67% de los ciudadanos opina que el fraude ha aumentado (el pico más alto desde 1995) debido, principalmente, a la impunidad existente hacia los que más defraudan (un 23%), la ausencia de honradez y conciencia cívica (un 21%) pero también la falta de eficacia en la lucha contra el fraude (un 16%).

En este sentido, el 83% de los ciudadanos piensa que "una agresiva campaña contra el fraude fiscal permitiría allegar los recursos suficientes para mantener la calidad de los servicios y prestaciones sin modificar la presión fiscal actualmente existente".

En opinión de Gestha, no sirven "soluciones parche" para disminuir los 100.000 millones de déficit público previstos para este año, sino que se precisan importantes cambios estructurales dirigidos a modernizar un Ministerio de Economía y Hacienda anclado en los años setenta, potenciar los recursos de las administraciones tributarias y construir una organización más funcional, ágil y eficaz.