(Libertad Digital) Desde el 1 de enero ya es posible solicitar la devolución del saldo del IVA cada mes, una medida novedosa tanto en España como en Europa con la que se pretende aumentar la liquidez y que, según el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, favorecerá a 300.000 empresas y les permitirá lograr una liquidez de 6.000 millones de euros.
Si bien hasta ahora la devolución del IVA se hacía al final de cada período de liquidación (trimestralmente), desde el 1 de enero todas las empresas pueden solicitar la devolución mensual del saldo del IVA. Esta medida, a la que antes sólo podían acogerse las compañías exportadoras, se enmarca en los planes del Gobierno para reactivar la economía y la liquidez. Una opción que es especialmente atractiva para las nuevas empresas, señala el ejecutivo, ya que las permite disponer de una mayor liquidez, al poder recuperar lo pagado por el IVA mensualmente.
Pero no es oro todo lo que reluce. Esta medida “estrella” del Gobierno no está teniendo especial calado entre las pequeñas y medianas empresas españolas. En este sentido se manifiesta Miguel Ángel Ferrer, socio director del departamento fiscal y contable de Arrabe Asesores, quien explica que en su despacho “de 1.000 clientes de cuota fija que tenemos no hemos recibido ninguna solicitud para presentar esta declaración mensual”.
A su juicio, “está bien dar la opción, porque siempre es bueno tener una mayor flexibilidad, pero no tendrá repercusiones importantes. En la situación actual, con una caída generalizada de la facturación no hay cuotas de IVA a devolver. La coyuntura se encarga de inutilizar la medida”.
Una "medida hueca"
Y es que los datos certifican que esta iniciativa sólo sirve a empresas que en épocas de bonanza generen una gran facturación y que son deficitarias de IVA (como ha sido el cado de las promotoras durante la expansión de la burbuja inmobiliaria). “Se trata de una medida hueca y que de ninguna manera sirve a las empresas para afrontar la crisis con más liquidez, tal como ha defendido el Gobierno”, explica Ferrer.
Esta falta de interés por la nueva posibilidad fiscal se constata también cuando se observa la escasa afluencia a las oficinas de la Agencia Tributaria para tramitar la medida. Según fuentes de las oficinas de censos de las delegaciones especiales de Hacienda, la atención a usuarios para que realicen este trámite se ha reducido en un tercio. Y no sólo es por la falta de interés, sino que también se produce un aumento de la burocracia que desincentiva a los pequeños empresarios.
Los empresarios que quieren realizar esta declaración mensual tardan una media de 6 meses en ser autorizados para ello por la Agencia Tributaria, ya que Hacienda tiene que incluir a los solicitantes –en caso de autorización- en un registro específico. Esto se suma a la paralización de las devoluciones del IRPF que ha realizado Hacienda debido a la falta de dinero en sus arcas por el desplome de los ingresos y el elevado gasto público estatal, autonómico y municipal.
Generará más fraude
Y las críticas no vienen sólo del sector privado, sino que los propios funcionarios dudan de la eficiacia de la reforma. La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado contempla con recelo la generalización las devoluciones mensuales del IVA. Argumentan que la medida dificultará las tareas de control tributario, implicará una carga de trabajo inasumible y obligará a Hacienda a devolver dinero sin una correcta supervisión.
Hacienda tiene un plazo de seis meses para ingresar las devoluciones del IVA a partir del día que la empresa realiza la declaración. Si se sobrepasa ese límite, el Estado debe pagar un 7% de intereses de demora. Según los inspectores, las devoluciones mensuales alargarán las tareas de control y denuncian que, para evitar los intereses de demora, se devolverá mucho dinero sin un correcto control tributario. Además, la organización de inspectores teme que las devoluciones mensuales abran una puerta al fraude fiscal. “Los delincuentes no tardarán ni cinco minutos en aprovechar esta vía”, aseguran.
Cuando el IVA soportado supera al repercutido, la Administración permite la devolución mes a mes. Lógico, porque al fin y al cabo, la pyme no es sino mera recaudadora de un impuesto cuyo destino es parcialmente estatal y autonómico. Lo normal es que el IVA repercutido de las ventas supere al soportado por las compras. De otra manera, habría pérdidas. Y en esa situación se encuentran 100.000 empresas, según el Ejecutivo.
Una medida "inaplicable"
Hasta el momento las empresas que se suelen acoger a este adelanto son grandes compañías inmobiliarias o constructoras, puesto que al soportar un IVA del 7% y estar sujetos los bienes y servicios que ofrecen al 16% siempre les sale a devolver. De ahí que opten por adelantarlo para disponer de mayor liquidez. También hay varias compañías del sector agrario que repercuten al 4% y que prefieren este método de devolución.
La Asociación de Asesores Fiscales y Gestores Tributarios denuncia que esta medidas del Gobierno para dar liquidez a las pymes, la devolución mensual del IVA, será en la práctica inaplicable, ya que es tanta la complejidad de la documentación que se va a exigir, que el posible beneficio para la pequeña y mediana empresa tendrá que pagarlo en burocracia. En su lugar la asociación propone que se permita a las pymes no pagar el IVA a la Administración hasta que no cobren las facturas.