Este viernes, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha destacado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que con esta iniciativa se da cumplimiento al mandato del Estatuto del Trabajador Autónomo, se satisface una "reivindicación histórica" del colectivo y se cumple con el compromiso de enviar esta ley al Parlamento antes de final de año.
Sin embargo, esto no significa que el proyecto vea la luz de manera inmediata, ya que su tramitación comenzará en enero y su entrada en vigor podría retrasarse hasta el próximo verano. Así lo ha explicado Lorenzo Amor, presidente de la asociación de autónomos ATA en el programa de esRadio En casa de Herrero.
El sistema que ha diseñado el Ejecutivo se basa en los principios de contributividad, solidaridad y sostenibilidad. Se trata de modelo mixto, entre voluntario y obligatorio, pues para poder cobrar el paro los autónomos tendrán que cotizar al mismo tiempo por accidentes laborales y enfermedades profesionales, contingencia que ahora mismo es voluntaria salvo en determinados casos, como el de los trabajadores autónomos económicamente dependientes (TRADE) o, en el futuro, el de los autónomos que operen en actividades profesionales con un mayor riesgo de siniestralidad.
En la actualidad hay 539.338 trabajadores autónomos que cotizan por contingencias profesionales, incluyendo a 176.000 trabajadores autónomos del sector agrario, aunque el Gobierno estima que cuando se determinen las actividades con mayor riesgo de siniestralidad (previsiblemente transporte, construcción, y algunas actividades industriales) y se desarrollen los contratos de los TRADE, el número de autónomos cotizantes ascenderá aproximadamente a un millón.
La prestación por cese de actividad de los autónomos no será menor de 583,38 euros mensuales y no podrá superar los 1.383,9 euros. Su cuantía, durante todo su periodo de disfrute, será equivalente al 70% de la base por la que el autónomo venía cotizando durante los doce meses anteriores al cese de su actividad.
Periodo de prestación
Su duración será de entre dos y seis meses, en función del periodo cotizado, si bien en los casos de trabajadores autónomos de entre 60 a 64 años se incrementa la duración de la prestación, con un mínimo de tres meses y un máximo de nueve meses.
En concreto, los autónomos que hayan cotizado de 12 a 17 meses tendrán derecho a dos meses de paro; los que hayan cotizado entre 18 y 23 meses cobrarán tres meses de prestación; los de 24 a 29 meses de cotización tendrán cuatro meses de paro; los de 30 a 35 meses cotizados percibirán la ayuda durante cinco meses y los de 36 meses o más de cotización cobrarán durante el máximo fijado, esto es, seis meses.
La duración de la prestación estará en función de los periodos de cotización efectuados dentro de los 36 meses anteriores a la situación legal de cese de actividad, de los que al menos 12 meses deben ser continuados e inmediatamente anteriores a dicha situación de cese.
8,3 euros mensuales de cotización
Desde el inicio de la situación de cese de actividad hasta el fin de la percepción de la prestación se cotizará a la Seguridad Social por el trabajador autónomo para que éste no pierda derechos para las prestaciones por contingencias comunes, en concreto para su pensión.
Teniendo en cuenta que en los primeros 12 meses no existe gasto en prestación, se ha establecido un tipo de cotización para los trabajadores autónomos del 1,5% de la base, con una reducción del 0,5% en la cotización por incapacidad temporal, por lo que el trabajador cotizará efectivamente para el primer año sobre un 1%, que sobre la base mínima de 833,40 euros, apunta a una cotización de 8,33 euros mensuales.
Cada año, la Ley de Presupuestos Generales del Estado establecerá el tipo de cotización que permita financiar este sistema de protección de los trabajadores autónomos que cesen involuntariamente en su actividad. El Consejo del Trabajo Autónomo, que se creará próximamente, analizará cada año la evolución del sistema y propondrá medidas para mejorar el mismo.
Anteproyecto
El pasado 20 de noviembre, también en Consejo de Ministros se aprobaba el anteproyecto de Ley para otorgar esta prestación a los trabajadores autónomos. También en este momento, De la Vega aprovechaba para decir que se trataba de una reivindicación histórica de este colectivo.
En aquella ocasión, el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, Lorenzo Amor criticó duramente el proyecto por considerarlo insuficiente. En cambio, en esta ocasión, Lorenzo Amor habla de un logro histórico. No obstante, vuelve a decir que "seis meses de paro no cubren las necesidades de protección social" que quieren los autónomos.
Esta máxima se repite en el proyecto aprobado este martes en Consejo de Ministros. Sólo establece una excepción para autónomos de entre 60 y 64 años. En estos casos, ahora el periodo máximo de cotización será de 9 meses según los casos.
Ahora, Amor habla de cambio de talante y dice que la crisis ya se ha llevado por delante a más de 400.000 autónomos y estos no cobrarán el paro. "No podemos mentir a los autónomos", la ley no empezará a tramitarse en el Parlamento hasta febrero y puede que no salga aprobada hasta junio.