L D (Agencias) El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch participó en el auditorio de esta ciudad en el acto central de la camapaña socialista para pedir el sí en el referéndum, donde también intervinieron el presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el canciller alemán Gerhard Schroeder, que esta vez sí acudió a su cita con Zapatero.
De su parte, el presidente del Congreso, Manuel Marín, en una conferencia en Ciudad Real, organizada por la Agrupación Local del PSOE criticó el "agobio" al que él considera que se está sometiendo a los ciudadanos por el hecho del alto desconocimiento existente sobre el texto de la futura Carta Magna europea, algo que puede desmotivar a la participación en el referéndum, según dijo.
En el acto de Zaragoza, Rodríguez Zapatero, reiteró que la decisión de los españoles en el referéndum de la Constitución de este domingo será "vinculante", y pidió que se acuda a las urnas masivamente, puesto que "no hay que confiar que las cosas salgan adelante con el voto de los demás".
El jefe del Ejecutivo aseguró que este domingo "España decide su futuro en Europa", pero para ello "es necesario cada voto", por eso avisó a quienes se puedan dejar vencer por la pereza: "que nadie piense que las cosas se arreglan solas y que otros votan por cada uno de nosotros; si queremos una Constitución y una Europa unida, una UE que defienda la paz, que dé empleo y progreso social, hay que ir a votarla".
"Cuando firmé el tratado constitucional con los otros 24 jefes de Estado y de Gobierno, pensé que una firma puede tener valor jurídico para tener una Constitución, llevarla al Parlamento y no convocar un referéndum. Pero por mucho poder que tenga un presidente, en la historia no cuenta lo que hace un hombre solo, sino lo que hacen muchos hombres y mujeres; hagámoslo este domingo, dando ejemplo de civismo, democracia y participación ante Europa", animó.
Zapatero abrió su intervención con un agradecimiento "de corazón y de cariño" al canciller alemán por asistir al mitin tras haber tenido que suspender su participación el pasado día 11 en otro acto junto al presidente francés, Jacques Chirac, a consecuencia de una gripe.
Entre todos los valores que propugna el tratado, Zapatero destacó especialmente "la paz", el "afán más noble que contiene cualquier ideal político", el valor que "lo puede todo, que cambia los pueblos, que permite el desarrollo", y por eso reclamó que se tenga en cuenta también que la Constitución representa "la esperanza" para otros países no miembros de la Unión.
Esta vez sí vino Schroeder
El canciller alemán, Gerhard Schroeder, aseguró que el tratado "no se puede hacer sin España", porque su pueblo y su cultura "forman parte de Europa" y porque no hay otro país que pueda tender puentes a otras regiones del mundo como América Latina, el mundo árabe o el norte de Africa.
Esta Europa "buena y vieja", insistió el canciller alemán, "necesita a España", pero España "también recibe mucho de Europa" y por eso se mostró convencido de que el próximo domingo, en el referéndum sobre el tratado, los españoles darán su "sí personal" a una Europa "moderna, fuerte, pacífica y social".