Dicen en el PSC que sienten cansancio y rabia. No me extraña. Precisamente por cansancio y por rabia abandoné ese partido hace dos décadas. Prueben a hacer lo mismo los que se quedaron y se les pasarán ambas sensaciones, ya verán. El PSC es una organización que está muy bien para marcharse. Tiene gracia que algunos intelectuales se hayan dado cuenta ahora de lo que se podía esperar del socialismo catalán. En fin, la iniciativa de crear un nuevo partido en Cataluña es digna de encomio. Si, como parece, van a presentarse exclusivamente a las elecciones autonómicas, miel sobre hojuelas: la izquierda no nacionalista tendrá representación en el Parlament sin que peligren las expectativas de voto del PP catalán en las generales. La cuestión es importante, toda vez que el nuevo partido atraerá una bolsa de votantes populares para quienes izquierda y derecha han dejado de ser variables decisivas ante el gran desafío soberanista.
Dicen en el PSC que hay que tomar “medidas legales” contra Acebes por vincular a la ETA con la reforma estatutaria: “ETA impone que Cataluña sea una nación”. Tienen la piel sensible. Sin embargo, a nadie escandaliza que el pobre Blanco califique a los de Rajoy de “voceros de ETA”. Vocero, según el DRAE, es la “persona que habla en nombre de otra, o de un grupo, institución, entidad, etc., llevando su voz y representación”. O sea, el PP no puede manifestar su opinión de que la ETA tutela un proceso, pero el PSOE sí puede acusar al PP de ser representante de la ETA. A pesar de que la segunda acusación resulta completamente increíble y no tiene más fin que la injuria. Y a pesar de que la primera, cierta o no, podría avalarse con hechos, encuentros, coincidencias objetivas y comunicados. Son las dos varitas de medir de nuestros caínes, que aún no han entendido que enseñar así los dientes cuando se gobierna los coloca fuera de las formas democráticas. Su exitosa experiencia en el golpe posmoderno y mediático los ha vuelto temerarios, han perdido el sentido de la realidad y de la proporción. Cejen: jamás acallarán a medio país.