Con este calor, Jerónimo Saavedra dice que pasaría una noche con Brad Pitt. Es sólo una fantasía venial, un ojo sin párpados que el ex ministro, de 69 años, se permite guiñar en una de esas entrevistas de cuestionario fijo que socorren la sequía periodística de verano. ¿A qué personaje real o de ficción le gustaría conocer? “A Tom Cruise porque nacimos el mismo día, sé que el año no coincide, pero da igual, lo cierto es que no me importaría conocerlo”. ¿Y con cuál pasaría una noche de pasión? “Con Brad Pitt”.
El chorro a presión del outing consigue el acoplamiento de generaciones. Se sale del armario para entrar en el azogue de Dorian Gray. Le he llevado el Super Pop a mi abuela de 80 años para preguntarle si Justin Timberlake le pone. Y a su marido, mi abuelo, le he mostrado un fondo de pantalla de Cameron Díaz para medir su respuesta hormonal.