Como dice en su Facebook el pintor Pavel Lominchar, aquello es ya como un inmenso "corral". Rebosante de carneros, reitero yo, dispuestos a aplaudir una tras otra las patadas por el sainete póstumo que les han propinado segundo a segundo durante 58 años.
Al menos se les escapó "un gallo del corral", subraya mi querido Pavel. Portando una bandera americana, digo yo, y creo que lo detuvieron. No estoy muy segura porque yo ya no estoy muy atenta a nada de esos actos de autorrepudio y autovómito de ese manso y cansón pueblo.
El caso es que surgió un patriota de los que allá se dan alrededor de por estas fechas y una vez por año por la casilla A4 del graciosito cuadernito de racionamiento, y agitó encima de sus hombros una bandera norteamericana. No importó que en su pecho llevara una desgarrada bandera cubana. Lo único que vieron los represores, siempre tan activos en los actos del 1º de Mayo, fue la abominable bandera norteamericana. Y según pude enterarme, de reojo así por encima de la coqueta de Facebook, de inmediato lo detuvieron.
Sí. Apresado por llevar una bandera estadounidense. ¿Pero no era que estaban queriendo hacerse amiguitos de los americanos? ¡Qué gente tan incongruente, pol Dió!
Por otra parte, ni se inmuten, ya verán ustedes al patriota de marras, maletica de rueditas a rastras en dirección a la Ciudad del Sol, Miami, de televisora en televisora, donde ya le habrán reservado el rol de libertador de Cuba, hasta el próximo acto de carneros que se produzca en la isla auspiciado por todas las organizaciones comunistas que controlan absolutamente todo, e igual hasta que los divulgadores miamenses comprueben que el supuesto libertador sólo se proponía saludar con "vehemencia combativa y revolucionaria" el arribo de otro crucero pitiyanqui a la isla.
Loquetrajoelbarcoetcéteraydemás... Yaesquemeaburroyomismadelomismoconlomismo.