El disidente cubano Eloy Gutiérrez Menoyo saludó, el pasado 26 de abril, la victoria electoral de José Luis Rodríguez Zapatero en las Generales del 14-M diciendo que los resultados eran una muestra de la "cordura española". Asimismo, aprovechó para criticar al anterior jefe del Gobierno, José María Aznar, por poner en práctica una política de "acoso inútil y acorralamiento insensato" contra la dictadura de Fidel Castro; una política que, a su juicio, estaba destinada a "retrasar cualquier proceso de cambio en la Isla".
Además, arremetió contra Oswaldo Payá Sardiñas, líder del Movimiento Cristiano Liberación, promotor del Proyecto Varela y Premio Sajárov del Parlamento Europeo, por felicitar a Zapatero al tiempo que agradecía a Aznar los servicios prestados a los demócratas cubanos. En este sentido, dijo: "Me deja perplejo que Payá insista en comer a dos carrillos".
Por otra parte, Menoyó afirmó que "muchos falsos disidentes" se dedicaban a tramar contubernios con la Polícia castrista o a jugar "la carta de una posible invasión norteramericana".
Eloy Gutiérrez Menoyo nació en Madrid hace 69 años, pero más tarde adquirió la nacionalidad cubana. Participó en la lucha contra Fulgencio Batista, y llegó a ser comandante en las filas revolucionarias. No obstante, rompió con Fidel Castro al poco de llegar éste al poder. En 1964 regresó a la Isla para intentar deponer por las armas a su antiguo compañero. Apresado, fue condenado a 50 años de cárcel, de los que cumplió 21. Fue excarcelado en 1986, gracias a las gestiones del presidente del Gobierno español, Felipe González. En 1993 creó en Miami el grupo Cambio Cubano, partidario del diálogo con la dictadura comunista. Finalmente, el pasado mes de agosto decidió regresar a la Isla con la intención de hacer oposición desde el interior.
A continuación, damos cuenta de la carta que nos ha hecho llegar Oswaldo Payá, donde responde a las manifestaciones de Menoyo arriba referidas. Nuestro colaborador Víctor Llano también ha escrito un artículo sobre este asunto.
RESPUESTA A LAS ACUSACIONES DE MENOYO
Oswaldo José Payá Sardinas
Coordinador del Movimiento Cristiano Liberación
La Habana, 27 de Abril de 2004
No es nuestro estilo responder a cada ataque o provocación de aquellos que, llamándose opositores, no hacen otra cosa que atacar a la oposición, dedicar toda la energía a disociar, sembrar la intriga y desalentar a los ciudadanos para que no apoyen nuestra iniciativa de cambios pacíficos [el autor se refiere al Proyecto Varela, que busca someter a referéndum popular una serie de iniciativas tendentes a democratizar la Isla]. Sinceramente, dedicamos el tiempo para luchar positivamente por la democratización de Cuba; no jugamos con el tema, ni vivimos de eso.
Pero el señor Eloy Gutiérrez Menoyo, una vez más –y parece que ése es su único quehacer–, ha lanzado una declaración en la que ofende, miente y une sus esfuerzos a los del régimen, acusándonos con los mismos argumentos con los que condenaron injustamente a nuestros 75 hermanos: los prisioneros de la Primavera de Cuba [los demócratas apresados en marzo de 2003, y condenados a penas que promedian los 20 años de cárcel].
Aunque la posición de su grupo –si es que es grupo–, llamado Cambio Cubano, ha sido petulante, descalificadora de todo lo que no fuera el propio señor Menoyo, totalmente asolidaria con la oposición interna, nosotros siempre lo hemos respetado. Básicamente, Cambio Cubano no tiene contenido propio como oposición, ya que todas sus expectativas y proyectos dependen de que el Jefe del régimen le haga la concesión de declararlo “la oposición aceptada y única.” ¿Es a eso a lo que el señor Menoyo llama “oposición legítima”? Hace muy bien en no contarnos entre esa “oposición”, ya que no tiene nada que ver con nosotros, con nuestra determinación de liberación, en la que el protagonista es el pueblo.
Quiero aclarar que no tengo tropas, ni grupos de asalto, ni recursos de inteligencia militar, ni la voluntad de apoyar ningún golpe de estado. Cuando el pueblo venezolano salió a las calles y en el mundo circuló la noticia de la renuncia del presidente Chávez, y además se conoció que había cierto peligro para los cubanos que estaban allí en misiones diferentes, envié dos cartas a través del expresidente Herrera Camping: una, saludando “al heroico Pueblo Venezolano” y deseándole que nunca sintiera lo que ha sufrido el pueblo cubano; otra, exigiendo el respeto a la vida y la integridad de todos los cubanos que estaban en Venezuela, cualquiera fuera de la causa de su estancia allí.
Aclaro esto ya que enviados del régimen se han movido por todo el mundo con la intriga que ahora repite el señor Gutiérrez Menoyo. Pueden publicar esas cartas. Pero debo aclarar que entre Menoyo, su defendido Chávez y yo, el único que nunca ha participado en acciones donde se mata a la gente para tomar el poder, o en golpes de estado, o en actos de violencia, ya sean desde o contra el poder, soy yo. Y no porque le tenga miedo a las armas, ya que muchas tienen los esbirros que me vigilan y persiguen día y noche, quizás con órdenes de aniquilarme en situación extrema. Pero no voy a huir. Respondo a estas acusaciones porque Menoyo, siguiendo la vieja escuela de este régimen, invierte totalmente la realidad. Creo que lo acabo de demostrar.
Saludé al señor Aznar porque no despreció los derechos de los cubanos, sino que los respetó, y porque es mi amigo, y saludé al señor Zapatero porque fue elegido por los españoles para que los gobernara. En ambos casos, la constante es que exijo el respeto a la dignidad de los cubanos. No sabemos a quién trata de manipular Menoyo: si a nuestra realidad, tan grave y peligrosa, para hacer politiquería en España, o si a la política española, para enrarecer el ambiente en Cuba. No hago política partidista en España, allí donde Menoyo trata de sembrar la discordia alrededor del tema cubano.
Si bien cuando Menoyo regresó –es decir, el último de sus muchos regresos– me adelanté, en medio de las críticas, a darle la bienvenida y a defender su derecho a vivir en este país, hoy le digo: si lo que quiere es hacer política como español, hágala en su país, y no la haga a costa de nuestra lucha por la liberación. Quiero decir que de España esperamos solidaridad con la liberación de los prisioneros políticos y los cambios pacíficos en Cuba; pero usted, señor Menoyo, le atribuye a la política de ese país un rol decisivo. Eso sí es injerencista e irreal. No lo quieren ni los españoles ni nosotros los cubanos, que somos los protagonistas de la liberación del totalitarismo.
Por último, quisiera comentar el asunto que realmente me obliga a responder al señor Menoyo. Él dice que la política de Aznar hacia Cuba fue la causa del encarcelamiento de mis 75 hermanos. Además, acusa a la oposición de desear una conflagración para tomar el poder, de jugar la carta de la posible invasión norteamericana y de dialogar con terroristas.
De esta manera, el señor Eloy Gutiérrez Menoyo se convierte en vocero de la infamia oficial, al repetir los argumentos falsos que sirvieron para condenar injustamente a los prisioneros de la Primavera de Cuba. Pero, además, me menciona a mí, que no estoy preso, o que aún no estoy preso. Parece ser que se prepara para ser testigo de cargo de la fiscalía. Lo hace muy bien.
Cumplo mi deber para con mis hermanos prisioneros que no tienen voz, para con los miles de firmantes del Proyecto Valera y para con todos los cubanos que viven dentro y fuera de la Isla, a quienes Menoyo ofende con esta gravísima declaración acusatoria.
Epílogo: Que nadie diga ahora que esto es una muestra de que la oposición está dividida, y que yo no debía responder. Esto es una muestra de que la oposición está viva y quieren matarla con la mentira. Y si respondo es para que la mentira, a fuerza de repetirse y no ser respondida, no llegue a confundir a la gente de buena voluntad.