Los rumores sobre las inmediatas consecuencias de las negociaciones del Estatuto de Cataluña no cesan. Y es que la controversia suscitada dentro del propio PSOE podría pasar factura en esa formación, aunque esto suene a lo mismo de siempre. Si el otro día reproducíamos las supuestas manifestaciones del ex presidente del Gobierno Felipe González sobre Zapatero, en las que calificaba escatológicamente al presidente, estos últimos días nos hemos enterado de que no es el único. Y si no fíjense cómo, al parecer, comparaba un ex ministro socialista a ambos mandatarios, tal y cmo le han contado a LD: "Comparar a Felipe con Zapatero es comparar a Dios con un gitano".
Pero más allá de este tipo de críticas, la ausencia de José Bono –y Rodríguez Ibarra– en el comité federal del PSOE del pasado sábado no ha pasado desapercibida. Dice El Semanal Digital este lunes que "fuentes de su entorno hablan de que el ministro de Defensa podría haber presentado ya al presidente su carta de dimisión, sobre todo a raíz de los últimos pronunciamientos de miembros del Ejército sobre el Estatut y el correctivo en el 'caso Mena'". En un artículo de Isabel García, ESD dice que "...como objeto de sus meditaciones han sido unas declaraciones de su 'buen amigo' Ibarra con las que se sintió aludido, y no era para menos. La semana pasada el presidente de Extremadura aseguró en presencia de Bono que él no aceptó la oferta de Zapatero para entrar en el Gobierno ("no como otros") porque prefería seguir haciendo política desde su tierra utilizando, eso sí, su voz y voto como miembro de los órganos de dirección socialista". Y este martes, comparecencia del ministro Bono en el Congreso a cuenta de la participación de la fragata Álvaro de Bazán en la guerra de Irak.
Sin salir de la movida estatutaria, El Confidencial relata otro episodio controvertido durante las negociaciones. Esta vez entre representantes de CiU y ERC, estos visiblemente molestos por el protagonismo del anterior. Cuenta el diario de Jesús Cacho que el hombre de Artur Mas en la mesa de negociación es Francesc Homs. Dice El Confidencial "el tal Homs, muy conocido en Cataluña, pero no así fuera, se saltó a la torera el compromiso de filtrar los documentos entregados en la reunión y que, para disgusto de sus compañeros de CiU presentes en el encuentro, Josep Antoni Durán i Lleida y Josep Lluis Sánchez Llibre, dio orden de repartir sin ningún disimulo las polémicas propuestas de redacción para un nuevo preámbulo que les había entregado el PSOE". Y eso que se habían comprometido a lo contrario. Pero lo más fuerte vino después cuando Homs devolvió vía agresiva aérea el rotulador a Joan Puigcercós. Vamos, que prácticamente se lo tiró. La respuesta de Puigcercós fue clara: "Quédatelo si quieres". La contra réplica de Homs aclaratoria: "No quiero nada tuyo". En fin, historias de amor estatutarias.