Detrás de los acontecimientos festivos que acompañan la tercera edición de "Perroton", la simpática "maratón canina" de Madrid, se oculta el intento de solucionar un problema impropio de cualquier país civilizado: la acumulación en los Centros de protección animal de una increíble legión de animales abandonados. Esta puede ser una excelente ocasión para adoptar uno de ellos.
Por tercera vez un graciosísimo pelotón de perros correrá, tan alegre como jadeante, desde Cibeles al Parque del Retiro. En esta carrera pueden participar tanto los animales como sus amos. Aunque no es una prueba competitiva habrá premios de naturaleza divertida. Perroton cuenta con numerosos patrocinadores, tanto privados como oficiales. La cita para la carrera el próximo 19 de octubre.
Previo a la carrera ha sido el conjunto de actividades desarrollado en el lugar habilitado en el Paseo de Coches del Retiro madrileño: "Perroton Village". Un evento que comprende exhibiciones caninas, talleres para niños y actuaciones de ese circo que su fundadora, la mediática Alejandra Botto, llama ecológico por haber desterrado del mismo la vida animal, sin duda una denominación paradójica, como lo sería un Perroton sin perros. ¿Por qué no llamarlo simplemente Circo sin animales?
No nos vamos a detener en la superficie, ni el el atractivo ni en la gracia que pueda tener este evento, aunque algunos perros estarán sin duda especialmente encantadores. Lo que verdaderamente merece la pena subrayar es la implicación de la Comunidad de Madrid, de la Consejería de Medio Ambiente, y en definitiva de las Autoridades, en el intento de solución del grave problema que supone la acumulación de animales abandonados en los centros, públicos y privados, de recogida.
La Asociación El Refugio, especialmente activa ante los medios de comunicación, con un Nacho Paunero al frente que cada vez se asemeja más a un Don Quijote del mundo canino, reclama a la Comunidad de Madrid el "sacrificio cero" de los animales recogidos en las instalaciones oficiales, y desde luego no hay nada que objetar a estas excelentes intenciones. No tener que sacrificar animales sanos es el viejo sueño de todos los que nos consideramos sensibles ante la tragedia de un perro o gato perdido o abandonado y después sacrificado estando en buenas condiciones de salud. Vamos a preguntarnos ahora si este deseo tan justa y razonable es materialmente posible.
Hay experiencias previas muy positivas en este sentido, como la desarrollada en Italia, donde no se sacrifica, o en la Comunidad de Cataluña que fue pionera en este sentido en España, pero el sacrificio cero requiere no sólo buenas intenciones, también recursos humanos, económicos y mucha responsabilidad por parte de todos los que tienen animales, especialmente perros y gatos.
Para que un Centro oficial, municipal o autonómico, pueda permitirse no sacrificar, con el consiguiente coste económico del mantenimiento de una población numerosa de animales recogidos, es preciso, en primer lugar, disminuir ese tapón de perros y gatos abandonados o perdidos que obtura hasta el momento el ciclo normal del sistema recogida-adopción. Para empezar es una excelente idea la instauración de un Salón Anual de la Adopción, en un marco tan incomparable como el Paseo de Coches del Retiro y bajos los auspicios de la Comunidad de Madrid, la Consejería de Medio Ambiente y de cuantas instituciones oficiales quieran reunirse con las protectoras privadas para trabajar todos en el mismo sentido.
Para curar una enfermedad es preciso diagnosticar correctamente, y creemos que la batalla contra el abandono está enfocándose bajo algunos errores monumentales, como es el enfrentamiento entre criadores y proteccionistas. El lema "No compres, adopta", se exhibirá con profusión durante estas jornadas, relacionando dos conceptos muy diferentes, pero no existe razón para que sean antagónicos. Atacar la cría de perros de raza hasta el extremo de pretender acabar con la venta es algo que no tiene parangón en los países civilizados y desarrollados, que saben compaginar la mejora de razas y la selección canina y felina con la protección y la lucha contra el abandono de animales, hasta prácticamente acabar con este problema.
En lugar de satanizar a quienes practican la cinofilia, sería mucho más eficaz buscar las verdaderas fuentes del abandono, que en multitud de casos se encuentran en la periferia de las ciudades, en zonas de construcción y en medios rústicos. El viejo mito del perrito comprado en Navidades y abandonado en Semana Santa o al llegar el verano no es más que un árbol que tiene importancia, pero que no deja ver el bosque. ¿Cuántas perras en celo vagan en ambientes suburbanos? ¿Quién controla la crianza de camadas no registradas en los Libros de Orígenes y nacidas por la irresponsable solicitud de alguien que pide que le "guarden" un cachorrito de determinada perra y en el último momento se vuelve atrás y renuncia cuando ya es demasiado tarde?
El problema es tan grande que todas las aristas que presenta deben coordinarse. A los criadores, en lugar de convertirlos en enemigos, habría que solicitar que sean muy prudentes en el número de sus camadas y cachorros dejando el máximo espacio libre para que se vaya desahogando el acúmulo de animales recogidos, algunos de ellos serán de raza, pero la gran mayoría no procederán de los excesos de la cinofilia, sino de las camadas incontroladas de perrillos "mil razas" que no pertenecen al mundo de la selección por parte de los criadores.
A los particulares simplemente habría que prohibirles que "jueguen a criadores" y que eviten la venida al mundo de camadas que, aún siendo de raza, no sabrán después gestionar para llegar a la necesaria salida de encontrar para todos los cachorros un amo responsable.
El simple lema "Adopta un animal", sin agresividad secundaria contra nadie sería suficientemente atractivo. Es necesario adoptar y un mestizo sin raza puede ser tan excelente compañero como otro con pedigree, esto es cierto, pero pasar de aquí al insulto a los criadores, parece sencillamente una injusticia. Hay que desterrar también el mito de que sólo pueda adoptarse un cachorro. Un adulto puede adaptarse a un nuevo amo de manera perfecta, que nadie lo dude.
De manera que ocasiones como este Salón de la Adopción no pueden desaprovecharse. La convocatoria de este 2014 incluye un lema que, esta vez sí, nos parece excelente: "Hoy adoptas tú". Con toda seguridad el favor que las personas generosas harán a un animal abandonado al adoptarlo será correspondida con una lealtad a la que nos humanos no sabemos ni siquiera aproximarnos.