Zarzuela suprime el homenaje a la bandera
El pasado miércoles, el periódico en Internet Estrella Digital publicaba una información de Joaquín Vidal, dando cuenta de que la Casa Real había suprimido los homenajes diarios a la bandera nacional en el Palacio de la Zarzuela, por deseo de la reina Letizia.
Según ese medio, a la reina le molestan los toques de corneta que se realizan a las 8 de la mañana, durante el acto de izado de bandera. También habría influido un incidente concreto: el retraso de unos minutos que la peluquera de la Reina tuvo que sufrir mientras se llevaba a cabo una de esas ceremonias. En general, según el citado medio, a la reina Letizia le molesta la presencia de personas de uniforme a su alrededor y en la cercanía de sus hijas.
El Palacio de la Zarzuela no es una instalación militar propiamente dicha, pero la Guardia Real es la que se encarga de la seguridad de la residencia, y el acto de homenaje a la bandera se ha celebrado siempre a diario, como en cualquier cuartel militar o buque de la Armada de nuestro país.
Tras la publicación de esa noticia el miércoles, este programa se puso el jueves en contacto con la Casa Real, para que la confirmara o desmintiera. Se nos dijo telefónicamente que la información no era correcta y que, como varios medios se habían interesado por el asunto, la Casa Real iba a emitir un comunicado desmintiendo la información.
Y, en efecto, el propio jueves la Casa Real emitió un comunicado. Pero lejos de desmentir la información, el comunicado confirmaba que el Rey Felipe había decidido suprimir en el Palacio de la Zarzuela el homenaje diario a la bandera, que ya solo se hará cuatro veces al año. Se prescinde así del izado diario de bandera al amanecer, como también se prescinde del arriado de bandera y del homenaje a los caídos al anochecer.
El comunicado de la Casa Real no explica los motivos por los que el Rey ha suprimido el homenaje a la bandera. En concreto, no desmiente al medio que publicó la noticia, ni le exige rectificación. Tendremos que dar por bueno, por tanto, que es cierto que a la reina Letizia le molestan los uniformes y las ceremonias militares y que ha sido a petición suya que el Palacio de la Zarzuela suprime el acto diario de homenaje a la bandera y a los caídos.
Déjenme decir que lamento profundamente que esto haya pasado, porque indica a las claras que alguien no está a la altura de su posición. No me importa, ni poco ni mucho, si a la ciudadana Letizia Ortiz le molestan los uniformes o el toque de corneta. Sus gustos particulares no me interesan. Pero la reina Letizia tiene unas obligaciones, entre las cuales están el respetar las tradiciones y los símbolos del país al que representa. Si eso le parece insufrible, que se busque otra profesión, sinceramente; a mí tampoco me gustan muchos aspectos de la mía, pero me aguanto, porque es la que he elegido.
Si la reina no soporta el homenaje a la bandera y a los caídos, entonces dudo mucho de que entienda correctamente cuáles son su misión y su papel institucional.