Anteayer le hicieron una entrevista al Director General de la Guardia Civil, Joan Mesquida, en la Cadena Ser. El entrevistador le preguntó por el 11-M, buscando su opinión sobre "los intentos de deslegitimación" de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que se estaban llevando a cabo desde el PP y desde ciertos medios de comunicación. Mesquida, en su contestación, dijo que es que hay personas empeñadas en demostrar que fue ETA y que lo que han hecho es partir de la conclusión buscada ("Ha sido ETA") para luego interpretar todas las dudas que puedan ir surgiendo de acuerdo con ese axioma de partida.
Déjeme decirle, Sr. Mesquida, antes que nada, que me parece usted un hombre discreto y educado, y déjeme también que le felicite por la labor que la Guardia Civil ha realizado (dejando de lado ciertas excepciones que no vienen al caso) en las investigaciones del 11-M. En aquellos pocos aspectos (fundamentalmente la trama asturiana) donde se ha permitido a la Guardia Civil intervenir en las investigaciones, los informes enviados al juez son infinitamente más exhaustivos, minuciosos, documentados, claros e incluso bien presentados, que los que Del Olmo ha recibido de la Comisaría General de Información de la Policía. A cada quien, lo suyo.
Pero, aclarado esto, déjeme decirle que anda usted algo atrasado de noticias en lo que respecta al actual estado de las investigaciones. A estas alturas, Sr. Mesquida, no estamos discutiendo si ETA participó o no participó en el 11-M. De lo que estamos hablando, por si no ha seguido usted las investigaciones, es de si las cloacas del Estado participaron sólo en la colocación de pruebas falsas o tuvieron, también, una participación en la propia masacre.
Déjeme que le cuente las alternativas que existen a día de hoy:
Desgraciadamente, Sr. Mesquida, cada vez ese clavo arde más, y ya no estamos nada seguros de que podamos llegar a agarrarnos. Las mentiras posteriores al 11-M han sido ya documentadas hasta la saciedad, pero cada vez son más los indicios que apuntan a que esas cortinas de humo venían preparándose antes del atentado.
Quiero decirle con esto, Sr. Mesquida, que, cuando nos acusan de estar empeñados en que fue ETA, no puedo evitar una sonrisa. Porque quien debería estar, a estas alturas, defendiendo la hipótesis de que fue ETA, y sólo ETA, es usted. Cualquier otra de las alternativas existentes es infinitamente más terrible.
Probablemente usted no me crea, pero déjeme, de todos modos, que finalice diciendo que nada me satisfaría más que estar equivocado y que ver despejadas todas mis dudas, gracias a que este Gobierno se decidiera, por fin, a dar las explicaciones exhaustivas, creíbles y coherentes que la sociedad española merece. Es más, estoy seguro de que mucha gente que cree honestamente en la versión oficial está echando también de menos, desde hace mucho tiempo, esas explicaciones.
Un saludo afectuoso.