Publicaba el viernes Gabriel Moris un artículo en Libertad Digital ("Lo que no puede esconderse en el silencio") que recomiendo vivamente leer. Todos los artículos de Gabriel son excelentes, pero en éste me ha llamado especialmente la atención un fragmento en concreto:
"El silencio que rodea al 11-M no es personal. Es tan institucional como cobarde. Tan oficial como desalmado. Delata a quienes lo practican, desprecia el sufrimiento de las víctimas, y a todos debilita como ciudadanos libres."
Con respecto a ese silencio "nada personal", este sábado desvelábamos, en el programa Sin Complejos, un nuevo documento que deja en evidencia la actitud obstruccionista del ministro Pérez Rubalcaba para con la juez que instruye la investigación por posible falso testimonio y manipulación de pruebas en el 11-M.
En concreto, se trata de la respuesta parlamentaria que el Gobierno dio a una pregunta de la ex-diputada popular Alicia Castro. En esa respuesta, el Gobierno desvelaba, palabra por palabra, el texto de ese artículo de las normas de procedimiento de los Tedax que ahora le niega a la juez, invocando la Ley de Secretos Oficiales.
¿Cuándo ha incumplido la Ley el Gobierno? ¿Cuando desvela un "secreto oficial" en sede parlamentaria o cuando niega a la juez algo que, en realidad, nada tiene de secreto? En cualquiera de los dos casos, me parece que el ministro Rubalcaba está encargándose de dejar meridianamente claro a qué puede estarse refiriendo Gabriel Moris al hablar de un silencio "tan institucional como cobarde".