A 10 DÍAS DE LAS OLIMPIADAS
La larga marcha de los católicos chinos
"Por supuesto que sí". Es la respuesta que ofrece el cardenal Joseph Zen, perplejo ante la duda de su interlocutor, cuando le preguntan si se puede verdaderamente ser cristiano hoy en China. A escasos diez días de la apertura de los Juegos Olímpicos de Pekín, este valiente testigo de la fe y luchador por las libertades contempla con algo de ironía la fascinación occidental frente a su inmenso país.