Benedicto XVI: “Mi verdadero programa de gobierno es no seguir mis ideas sino escuchar la voluntad de Dios”
“Mi verdadero programa de gobierno es el de no hacer mi voluntad ni de seguir mis ideas, sino el de ponerme a la escucha, con toda la Iglesia, de la voluntad del Señor y dejarme guiar por Él, para que sea él mismo quien guíe a la Iglesia en esta hora de nuestra historia”. Con estas palabras resumió sus deseos para este pontificado Benedicto XVI durante la homilía del domingo en la misa de entronización.
En un discurso frecuentemente interrumpido por los aplausos, el Papa tuvo muy presente la figura del anterior Pontífice, especialmente en su muerte reciente: “La iglesia está viva, ésa es la maravillosa experiencia de estos días de tristeza por la enfermedad y la muerte del Papa: que la iglesia está viva y que la Iglesia es joven, que lleva en sí el futuro del mundo, y que nos muestra a cada uno de nosotros el camino del futuro”.
Por otro lado, explicó largamente el significado de los signos distintivos del ministerio papal, el palio y el anillo del pescador, como signo del Buen Pastor y de la pesca milagrosa narrada en los evangelios. Respecto a la segunda, recordó que “la red se ha roto”, en referencia a la división entre los cristianos, y expresó su determinación de “hacer todo lo posible por recorrer el camino de la unidad, para que seamos un solo pastor y un solo rebaño, según la promesa de Cristo”.
Sobre el significado de la figura del pastor, el Papa recordó los “desiertos materiales y espirituales” que atraviesa el hombre hoy, y recordó que Jesucristo “se hizo a sí mismo oveja: Dios se ha puesto de parte de las ovejas, para mostrar que el mundo se salva por el crucificado y no por los crucificadores, es redimido por la paciencia de Dios y es destruido por la impaciencia de los hombres”.
La misa de entronización con una plaza de san Pedro y una vía della Conziliazione atestadas, comenzó con la procesión de los cardenales y del nuevo Papa desde la tumba de san Pedro, donde había rezado en compañía de los obispos orientales hasta la plaza.
Crítica del cardenal Martínez Somalo al Gobierno por la aprobación de los “matrimonios homosexuales”
En una cena privada celebrada en la Embajada española en Roma la noche del sábado, víspera de la misa de inicio del Solemne Pontificado de Benedicto XVI, el cardenal Camarlengo, acompañado por los cardenales españoles, manifestó su tajante desaprobación, ante las autoridades españolas y en presencia de los Reyes de España, por recién aprobado proyecto de Ley de “matrimonio homosexual”.
El cardenal Camarlengo, Eduardo Martínez Somalo, en su intervención durante la cena ofrecida a la delegación española que ha acudido a Roma a la misa de inicio de Solemne Pontificado de Benedicto XVI, aludió al recién aprobado proyecto de Ley de “matrimonio homosexual” en España. Sus duras críticas a esta decisión iban dirigidas al Gobierno y los ministros de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos; Defensa, José Bono, y Justicia, Juan Fernando López Aguilar, impulsor del proyecto legislativo, y la directora general de Asuntos Religiosas, Mercedes Rico Carabias. En representación del Partido Popular asistieron, el presidente, Mariano Rajoy, Eduardo Zaplana, Ángel Acebes y Jorge Fernández junto con sus esposas. En referencia al proyecto de Ley español el cardenal Martínez Somalo dijo en su intervención que “no se puede ir contra el derecho natural y la moral de la persona”.
Este es el segundo pronunciamiento de un cargo vaticano contra la aprobación del matrimonio homosexual después de que hubieran pasado menos de dos días desde que el proyecto de Ley se presentase en la Cámara Baja española. El viernes, un día después de su aprobación en las Cortes, Il Corriere della Sera publicó unas declaraciones del cardenal colombiano Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para la Familia, en las que éste aseguraba “que lo que se está haciendo en España, además con una mayoría restringida, es la destrucción de la familia, ladrillo tras ladrillo”.
A la cena víspera de la misa de inicio del Solemne Pontificado del Santo Padre, celebrada en la embajada española en Italia, acudieron los cardenales españoles que han participado en el cónclave que ha elegido Joseph Ratzinguer nuevo Papa, a excepción del cardenal Francisco Álvarez.
Benedicto XVI en San Pablo Extramuros: la misión es más actual que nunca
El Papa Benedicto XVI, visitó el lunes la basílica romana de San Pablo Extramuros y allí relanzó la obra evangelizadora, asegurando que el “mandato misionero de Cristo es más actual que nunca”. En su primera visita oficial fuera del Vaticano, el Santo Padre confío además en un “nuevo florecimiento de la Iglesia” gracias a la sangre derramada por muchos cristianos del siglo XX en diferentes rincones del planeta.
Con un gesto inusual, el Papa Joseph Ratzinger, al día siguiente del inicio solemne de su pontificado, quiso acercarse para rezar ante la tumba del apóstol san Pablo, “para expresar el lazo inseparable de la Iglesia de Roma con el apóstol de las gentes”, según explicó la Santa Sede.
Tras venerar el sepulcro y leer el inicio de la Carta de Pablo a los Romanos, el nuevo obispo de Roma pronunció una homilía centrada totalmente en la pasión por el anuncio de Cristo que debe experimentar todo cristiano. “Que el Señor infunda también en mí un amor así para que no me quede tranquilo ante las urgencias del anuncio evangélico en el mundo de hoy”, deseó.
Para Benedicto XVI “la Iglesia es por su naturaleza misionera, su tarea primaria es la evangelización”, reconoció, por eso “al inicio del tercer milenio, siente con renovada fuerza que el mandato misionero de Cristo es más actual que nunca”. Tras recordar que el Jubileo del año 2000 ha llevado a la Iglesia a “recomenzar a partir de Cristo”, recordó el lema que san Benito propuso en el capítulo IV de su “Regla”, al exhortar a sus monjes a “no anteponer nada al amor de Cristo”.
Constatando que el siglo recién terminado “ha sido un tiempo de martirio”, concluyó considerando que “si la sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos, al inicio del tercer milenio es lícito esperarse un nuevo florecimiento de la Iglesia, especialmente allí donde más ha sufrido por la fe y el testimonio del Evangelio”. Al final de la sobria celebración, animada por los cantos de los monjes benedictinos de la basílica, el Papa salió en procesión, saludando a algunos de los presentes con la mano e impartiendo el gesto de la bendición. Sólo se detuvo para abrazar a un niño.
El nuevo Papa confirma el compromiso ecuménico "irreversible" de la Iglesia
El nuevo obispo de Roma, Benedicto XVI, confirmó el lunes el compromiso ecuménico “irreversible” de la Iglesia católica, e hizo un llamamiento para que los creyentes de todas las religiones se conviertan en promotores de paz. Las palabras del Papa Joseph Ratzinger resonaron en la Sala Clementina del Palacio Apostólico Vaticano, donde recibió a los representantes de las confesiones cristianas y de otras religiones que este domingo participaron en la misa de inicio solemne de pontificado.
“Siguiendo las huellas de mis predecesores -comenzó diciendo-, en particular de Pablo VI y de Juan Pablo II, siento intensamente la necesidad de afirmar nuevamente el compromiso irreversible, asumido por el Concilio Vaticano II” para recorrer el “camino hacia la plena comunión querida por Jesús para sus discípulos”.
Este objetivo, reconoció, “implica una docilidad concreta a lo que les dice el Espíritu a las Iglesias, valentía, dulzura, firmeza y esperanza para llegar hasta el final. Implica, ante todo, la oración insistente y con un solo corazón, para lograr del Buen Pastor el don de la unidad para su grey”.
El Papa agradeció en particular la presencia “de miembros de la comunidad musulmana” y expresó su aprecio “por el crecimiento del diálogo entre musulmanes y cristianos, tanto en el ámbito local como en el internacional”. “Os aseguro que la Iglesia quiere seguir construyendo puentes de amistad con los seguidores de todas las religiones para buscara el bien verdadero de todas las personas y de la sociedad entera”, aseguró.
“Al inicio de mi pontificado -concluyó- os dirijo a todos vosotros y a los creyentes de las tradiciones religiosas aquí representadas, así como a todos los que buscan con corazón sincero la Verdad, una intensa invitación a convertirnos juntos en artífices de paz, en un recíproco compromiso de comprensión, de respeto y de amor”.
Se inaugura en la catedral de La Almudena la exposición "Inmaculada"
La exposición "Inmaculada" -que reúne 132 obras en torno a este tema, procedentes de casi todas las diócesis españolas- puede visitarse desde este fin de semana y hasta el 12 de octubre en la catedral de La Almudena. Organizada por la Fundación “Las Edades del Hombre”, a petición de la Conferencia Episcopal Española, la muestra forma parte de los actos programados para celebrar el 150 Aniversario de la Declaración del dogma de la Inmaculada Concepción.
Durante la presentación, Antonio Meléndez, presidente de esta fundación, destacó que la exposición tenga "lugar en una catedral dedicada a la Inmaculada", y dijo que el título "Inmaculada de La Almudena", es tal vez el "menos conocido" de la patrona de Madrid.
Está previsto que los actos de culto no se interrumpan durante la duración de la exposición. La muestra se desarrollará en las naves laterales, el crucero, la capilla del Santísimo y la girola de la catedral, mientras la nave central se reservará para las celebraciones litúrgicas. Meléndez no cree que este sea un inconveniente, y puso como ejemplo la exposición organizada también por la Fundación en catedral San Juan el Divino de Nueva York, donde gracias "a las audio-guías colectivas, se pudo bajar muchísimo el nivel de ruidos y facilitar la concentración". En este sentido, recordó que las obras que se exponen "fueron hechas para su contemplación en las iglesias y no en los museos".
En total, un recorrido de 2000 metros cuadrados de exposición; 132 obras procedentes de 40 diócesis españolas; en la que han colaborado 17 instituciones públicas y privadas prestando alguna de las piezas.
La exposición está organizada en cuatro capítulos que discurren entre un prólogo, que sirve de enmarque a la muestra, y un epílogo representado por la única obra actual de la exposición: un lienzo encargado por la CEE a la pintora y monja cisterciense, Isabel Guerra. Como dijo Meléndez, se trata de una "exposición-relato", en la que se instrumentaliza la obra de arte para construir el relato: "Va a presentar, a través del desarrollo cronológico de los estilos artísticos, cómo se ha ido conformando la fe del pueblo español en la Concepción Inmaculada de la Virgen María".