Alguna pista, sin embargo, sí que podemos aportar. La llamada telefónica al ex-jefe de la Casa del Rey se ha producido a los dos días de celebrado en El Escorial un curso de verano titulado “La figura del heredero de la Corona”, que ha coordinado Fernández Campo y que, según todas las crónicas, constituyó un verdadero fracaso por lo que se refiere a asistencia de alumnos y a eco en los medios de comunicación.
En ese ciclo, de dos días, intervino el propio coordinador, que habló sobre un asunto, de entrada, delicado: “Matrimonios regios”. En el entorno de las noticias sobre esa amistad del Príncipe con Eva Sannum, y la polémica que ello ha provocado, tal enunciado no podía ser más de actualidad. Participaron también nombres muy autorizados como Aurelio Menéndez (preceptor de los estudios universitarios del Príncipe), el ex-vicepresidente del Gobierno Alfonso Osorio, Antonio Torres del Moral (que habló sobre el Estatuto jurídico del Príncipe) y los catedráticos Feliciano Barrios y Pedro González Trevijano.
A primera vista, un curso sobre una figura tan popular como el Heredero, y —se quiera o no— con el “morbo” añadido de ese trasfondo de noviazgos, dio que pensar que se llenaría de asistentes y también de medios informativos. No ha ocurrido así. Algunos han achacado el fiasco a falta de promoción y apoyo por parte de los responsables de los cursos de El Escorial. Y también ha habido quien apuntó en otra dirección, sugiriendo resistencias en el Palacio de la Zarzuela a un curso de esas características.
Insisto: solamente el Príncipe y Fernández Campo conocen el contenido de la conversación del jueves. Pero me apostaría el bigote a que todo esto ha salido a colación. Estoy seguro de que Felipe de Borbón quería saber qué ha pasado.