La heredera a la Corona sueca, de 29 años, y su novio, de 33, volaron a Milán el día 27; desde allí fueron escoltados por la policía hasta la exclusiva villa que alquilaron, junto con otras dos parejas de amigos.
Desmintiendo los rumores de ruptura surgidos hace varias semanas, Victoria y Daniel se mostraron muy relajados, risueños y más cariñosos de lo habitual. La pareja aprovechó su estancia en Cortina d'Ampezzo para practicar el esquí y disfrutar de unas jornadas románticas, que se prolongaron hasta después de Nochevieja.
Victoria y Daniel se conocieron a principios de 2002, cuando la primogénita de los reyes de Suecia se apuntó a un gimnasio y eligió a aquél como entrenador personal. Daniel Westling, militar, es, desde entonces, el empresario de moda en Estocolmo.
La prensa sueca lleva dos años especulando sobre un inminente enlace entre la princesa y el entrenador, a quien el padre de Victoria parece, finalmente, haber aceptado.