Melnaes dice que, hace cinco años, la revista le mandó a Londres a comprar un bolígrafo con cámara oculta y una moneda con micrófono incorporado, que habían de ser entregados a un amigo de Mette- Marit. Por aquel entonces se hablaba mucho de las fiestas que se daban los Príncipes en la capital británica. Se og Hor consiguió hacerse con informaciones sobre las supuestas escapadas de Haakon y Mette-Marit, pero no salieron a la luz debido a que alguien filtró a tiempo los planes de la citada cabecera.
El ex reportero de Se og Hor sostiene que el padre de la Princesa, Sven O. Hoiby (ex periodista, de 69 años, al que hace tan sólo unos meses se le diagnosticó un cáncer de pulmón), fue una de las principales fuentes de información de la revista, que le llegó a pagar entre 37.000 y 49.000 euros al año.
A raíz del revuelo suscitado, la Asociación de la Prensa Noruega ha instado a Se og Hor a revisar sus métodos de trabajo. Por lo que hace a la referida publicación, su redactor jefe, Odd J. Nelvik, ha negado que existiera una operación de espionaje sobre Mette-Marit y ha acusado a Melnaes de "ideas una novela de ladrones" en la que el "malo" es, precisamente, Nelvik.