La esposa del rey Abdalá preside organizaciones benéficas como la Fundación Río de Jordania (fundada por ella misma en 1995 para ayudar a los más desfavorecidos de su país) o la Sociedad Jordana de Donación de Órganos, y desde el pasado enero es abogada extraordinaria de la infancia, título que le fue otorgado durante el Foro Económico Mundial de Davos.
Recientemente el espíritu solidario de la Reina se ha visto de nuevo compensado; en esta ocasión, con el premio John Wallach de la Paz. El galardón le fue entregado durante la gala Seeds of Peace (Semillas de la Paz), organizada en Nueva York por la entidad del mismo nombre, que presta ayuda a adolescentes de regiones en conflicto.
"Es un honor otorgar este premio a uno de los más grandes pacificadores del mundo. Su compromiso con la misión de Seeds of Peace no tiene precedentes", dijo Nicolla Hewitt, presidente de SP. "El compromiso de Su Majestad la reina Rania por trabajar a lo largo de Oriente Medio y en el mundo educando a niños de países en conflicto y ofreciendo oportunidades para la paz la convierte en merecedora de este premio".
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