"Lo hace porque le encanta bailar, le divierten los retos y ve esta oportunidad como una combinación de ambas cosas", ha declarado el portavoz de Mills, Phil Hall. Asimismo, aseguró que su decisión "no tiene que ver con el dinero, sólo con el reto y la diversión".
La que fuera esposa de McCartney perdió una pierna en un accidente de motocicleta en 1993, y desde entonces lleva una prótesis. Será la primera concursante de este programa con una limitación física de ese tipo. Su portavoz quiso recalcar que no es sencillo bailar con una pierna artificial: "Esquía con una prótesis, corre y anda en bicicleta. Este es uno de los muchos desafíos a los que se ha enfrentado". Y añadió: "Es algo que podría hacer que se olvide de algunas de las dificultades que ha tenido".
Y es que el polémico proceso de divorcio de Mills y McCartney, que comenzó en mayo, aún no ha llegado a su fin. Han sido muchos los cruces de acusaciones, y, puesto que en su momento no pudieron llegar a un acuerdo amistoso –ella habría rechazado las ofertas económicas del ex beatle –, han continuado su disputa en los tribunales.
El último capítulo de esta historia lo escribió Heather hace pocos días, cuando acudió a una comisaría para denunciar amenazas de muerte. La modelo habría confesado además que teme por su seguridad y la de su hija Beatrice, de tres años.
Curiosamente, y debido a esas casualidades que a veces ocurren, Paul McCartney podría disputarle la popularidad televisiva a su ex mujer. Y es que la cadena Fox ha empezado a emitir la sexta edición de American Idol (la versión estadounidense de Operación Triunfo ), en la que McCartney podría aparecer como jurado invitado, si bien esto último no ha sido confirmado.
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