Gina Lollobrigida y Javier Rigau reaparecen en Nápoles

A la actriz le faltó tiempo para coger el micrófono y denunciar las intromisiones en su vida privada de que está siendo objeto. Asimismo, dijo que ella y Rigau nunca se han peleado, y aprovechó la circunstancia para pedir a los políticos presentes en el acto la creación de una ley que tutele la privacidad de los personajes famosos, para evitar que se "esparza" el "veneno".

 

El pasado día 5 el despacho de abogados de Javier Saavedra, responsable de los asuntos legales de Rigau, difundió un comunicado en el que se decía que la pareja, que tenía pensado contraer matrimonio el próximo 27 de enero en Roma, había decidido cancelar el enlace debido a las "falsas y constantes intromisiones ilegítimas en el honor e intimidad" de sus integrantes. Dos días después la Lollobrigida emitió otro comunicado, en el que se podía leer, entre otras cosas, lo que sigue: "Hemos decidido cancelar nuestra boda, pero seguiremos viéndonos, somos amigos y nos respetamos. Lamentablemente ha pasado lo que tenía que pasar. Javier se encuentra en un estado lamentable, las difamaciones realizadas por la prensa y la televisión lo han destruido".

 

Pero el anuncio de la suspensión de la boda no ha conllevado la ruptura. "No nos vamos a enemistar; por el contrario, nos vamos a seguir viendo y queriendo. Además, lo que hagamos es cosa nuestra. Me quiero salir de este escaparate, porque es algo sencillamente horroroso", comentó recientemente Rigau a un grupo de amigos.