Se cumplen dos años de la holgada victoria electoral del Partido Popular, cuyo Gobierno, al mando de ese desaforado y feroz reformador liberal que es don Mariano Rajoy Brey, es el más indómito y bravío que vieron los siglos pasados y presentes.
¿Son ustedes partidarios de hacer cambios en su composición? ¿Les gusta como está? ¿A qué huelen las nubes? ¡Pronúnciense, buenas gentes! Nuestros vates ya lo han hecho:
PEQUEÑOS REAJUSTES EN EL GABINETE
por Fray Josepho
El de Justicia, fuera, que es Alberto.
En Sanidad, la Mato pide el cese.
A Wert, igual (le pese a quien le pese).
Y a Margallo, por tanto desacierto.
El Montoro, que es torpe y boquituerto,
a su casa (o a Parla) que regrese.
El de Interior, también (que se confiese).
Y Báñez (que es torpísima, por cierto).
A la calle, Pastor (la de Fomento).
Cañete y Morenés, a tomar viento,
con Soria, Luis de Guindos y Soraya.
¿Son trece? ¿Ya están todos? ¡Aleluya!
¡Pues que también Rajoy se destituya,
se dé a sí mismo el cese, y que se vaya!
NI TOCAR
por Monsieur de Sans-Foy
Catorce son los versos del soneto.
Catorce los ministros, con Mariano.
¡Discrepo de que enrede y meta mano,
privándonos de equipo tan completo!
Me he puesto yo solito en un aprieto,
negándome a los cambios tan temprano:
Mi afecto por el Cónclave Profano
no llega ni al final de este cuarteto.
Quién fuera motorista de uniforme,
llevando en bandolera la cartera...
pisando la Moncloa, satisfecho:
¿Me firma el recibí, si está conforme?
¡Cesados y a la calle! ¡Todos fuera!
Contad si son catorce, y está hecho.