CÓMO ESTÁ EL PATIO
¿Dónde colocamos a ZP?
Los presidentes del gobierno de España son unos trabajadores ejemplares a los que, en premio por sus desvelos y aciertos, el resto de los ciudadanos otorgamos una más que confortable jubilación, para que puedan pasar los últimos cuarenta años de su vida divagando sobre los problemas del planeta, asesorando a multimillonarios, leyendo en público los papeles que les escriben sus equipos a modo de conferencia y, en fin, zascandileando en la política nacional sin asumir coste político alguno.