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Shanghai

La joya de la nueva China

Toda Asia mira a Shanghai. Por algo será...

Toda Asia mira a Shanghai. Por algo será...
Edificio Jinmao, que alberga el Hotel Hyatt de Shanghai.
Parece que China mueve el mundo. Su industria hace subir el petróleo, sus movimientos internos de población crean nuevas ciudades y su capacidad industrial rompe los esquemas de las actividades del ramo. Shanghai resume todos estos cambios en una nueva Edad de Oro. Toda Asia mira a Shanghai; por algo será…
 
Actualmente Shanghai es conocida por su espectacular circuito de Fórmula 1 y la no menos espectacular agresividad de su nueva arquitectura. Pero detrás de estos símbolos, cargados de propaganda, hay mucho que descubrir. Es, sin duda, la zona más populosa de China, y cuenta con el segundo puerto de mercancías más activo del mundo. Pero, por encima de todo esto, el “recién llegado” no tiene más remedio que denominar a Shanghai "la ciudad de las demencias”.
 
Piscina del Gran Hyatt de Shanghai.La ciudad con el hotel más alto del mundo todavía tiene una dependencia enorme del carbón, con la contaminación que eso supone. Pero también hemos descubierto que los desechos sólidos son llevados a áreas rurales, donde se emplean como fertilizantes. Mientras, la basura no orgánica se reutiliza para llenar hoyos o hacer tabiques. Ciudad de contrastes, Shanghai, porque en realidad es la urbe menos “orientalizada” de toda China. Grandes rascacielos, zona financiera, ejecutivos, multinacionales... La contradicción viene cuando descubrimos que fue aquí donde tuvo su origen el Partido Comunista Chino.
 
Pero, más allá de contradicciones, hay que reconocer que merece la pena venir a Shanghai. Lo demuestran los 140.000 millones de yuanes, unos 16.800 millones de dólares, que ingresa gracias al turismo. Se calcula que vienen de fuera anualmente casi cinco millones de extranjeros, y tanta gente no puede equivocarse.
 
Durante nuestra visita nos hemos encontrado con varias obras, muchas de ellas relacionadas con el objetivo que se ha marcado la ciudad para el 2010. Pretende acoger la Exposición Universal para esa fecha, y con ese objetivo ya ha inaugurado un impresionante auditorio de más de 40.000 metros cuadrados. Nos hemos quedado boquiabiertos con tal obra arquitectónica, realizada, según nos explican los guías, por el arquitecto francés Paul Andreu. Si quieres ser alguien en el mundo parece obligado tener oficina en Shanghai. 
 
Nos hemos quedado con las ganas de visitar lo que será la mayor estación de autobuses de larga distancia de toda Asia. La zona de obras está cerca de la actual estación de ferrocarriles. Los gobernantes han definido esta futura infraestructura como “una obra emblemática”. Esa es la nueva “Dama de Shanghai”.
 
Aquellos días de gloria reflejados en el cine vuelven a las calles. De lo que sí hemos podido ver nos ha llamado la atención la zona de El Bund. Se encuentra al sur del río Wusong, que se encarga de partir en dos a Shanghai. En la zona norte todavía se conserva algo del ambiente nipón, del que luego hablaremos. El Bund es como Wall Street. Aquí hay grandes edificios, gran cantidad de comercios. Es la zona de negocios por excelencia. Entre todas las grandes edificaciones nos ha llamado la atención el viejo Banco de Hong Kong y Shanghai.
 
Otra zona que visitar es la calle Nanjing. Está llena de comercios, y de apreturas; y es que no hay que olvidar que aquí viven casi doce millones de personas. A pesar de ello, la visita se nos hace agradable, al comprobar que podemos encontrar casi de todo: seda, instrumentos musicales chinos y cantidad de obras de arte y antigüedades.
 
La posibilidad de comer en un McDonald's y de comprar alfombras se puede compaginar en esta parte de la ciudad con visitas culturales al Gran Museo de Shanghai y al Museo de las Ciencias Naturales. Este último, con esqueletos humanos de más de 3000 años de antigüedad.
 
Adentrarse al sur del Wusong es introducirse en la parte occidental. Pero ir hacia el norte es descubrir pequeñas callejuelas. Es establecer contacto con gentes y costumbres orientales. Y sobre todo con la gastronomía china, de verdad y sin complejos. Ahora sí parece que estamos en Oriente. Divisamos las típicas casitas con todo tipo de detalles en su arquitectura.
 
La religiosidad está más presente en los habitantes de esta parte. Da la sensación de que en el mundo de los negocios no tiene sentido la espiritualidad. Aún así, hay que recomendar la visita al edificio de los Dioses de la Ciudad, que actualmente es un bazar. Tampoco pueden dejar de visitar dos templos muy conocidos por su belleza y riqueza histórica: el del Buda Jade y el Longhua.
 
Jardines de Yuyuan, en la ciudad antigua.No hay que olvidar que estamos en una ciudad altamente industrializada. El área de Pudong es un claro ejemplo de gran superficie plagada de empresas, de industria y, en definitiva, de riqueza. Precisamente por eso son necesarios los “pulmones”.
 
Nos referimos al Parque del Pueblo, una espectacular zona de esparcimiento al aire libre. Un inmenso espacio verde que viene a sustituir al antiguo hipódromo. Es parada obligatoria para descansar, relajarse y tomar un respiro dentro de esta ciudad que a veces da la sensación de estar acelerada. Tiene muchos aspectos que nos recuerdan más a las grandes capitales europeas que a las tradicionales ciudades asiáticas.
 
 
Dónde dormir
– Okura Garden Hotel. 58, Maoming Nan Lu. Tel: 86 21 6415 1111. Fue construido en 1926 por arquitectos franceses. En 1949 se convirtió en el Palacio de la Cultura del Pueblo, y en 1959 sirvió de alojamiento a Mao.
– Hotel Grand Hyatt de Shanghai. Jin Mao Tower. 2 Century Boulevard. Tel: 86 21 5047 1234. Situado en la torre Jin Mao, el edificio más alto de China, este hotel es también el más alto del mundo. Ocupa desde la planta 53 hasta la 87, y tiene toda clase de lujos, además de unas sensacionales vistas.
– Hotel Star-Wave. 36, Huimin Road. Un hotel de tres estrellas para bolsillos más apretados. Aun así, tiene todos los servicios necesarios para una agradable estancia, como conexión para ordenadores portátiles.
 
Dónde comer
– Di Shui Dong. 56, Maoming Nan Lu. Tel: 86 21 6253 2689. Especializado en cocina de Hunan, que es un poco más picante que el resto de las cocinas chinas.
– 1931. 112, Maoming Nan Lu. Tel: 86 21 6472 5264. Decorado al estilo de los años treinta, tiene una carta que mezcla la cocina de Shanghai con la japonesa.
 
Oficina de Turismo de China
Gran Vía, 88, grupo 2, planta 16. Tel: 91 548 00 11 - 902 10 19 03.
www.embajadachina.es.
 
Oferta
Catai. Tel: 91 409 11 25. Catai nos ofrece en un viaje de siete días entre Pekín y  Shanghai por 1.374 euros.
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