No bien se concretó el acuerdo entre el grupo Recrear, de López Murphy –quien, como se recordará, tuvo una brevísima actuación como ministro de Economía con Fernando de la Rúa (dos semanas, apenas, en las cuales había despertado internacionalmente tantas buenas expectativas con su plan de ajustes rigurosos)–, con el justicialista Macri (presidente del club Boca Juniors), Kirchner no ha dejado de hablar contra ellos, a veces con inusitada dureza, con lo cual les está catapultando hacia un rápido ascenso.
Las críticas han sido dirigidas especialmente hacia López Murphy, pero éste, a su vez, ha recordado que el actual mandatario acompañó en numerosas oportunidades al ex presidente Carlos Menem. Ahí pega duro a quien juega a despegarse de Menem desplazándose cada día más hacia la izquierda.
2) Parece que finalmente Cristina Fernández de Kirchner se quedará con las ganas... y deberá postularse por su provincia patagónica, es decir, la de su esposo, ya que, de no hacerlo, Néstor Kirchner podría ser derrotado allá. Desde hace tiempo la senadora Fernández venía sugiriendo la posibilidad de postularse por Buenos Aires, desafiando un territorio de Alberto Duhalde, cuya esposa aparece como la principal aspirante. Se avecinaban rudos enfrentamientos entre ambas damas, pero ahora, ante las dificultades que en su propia tierra enfrenta Kirchner, parece diluirse el conflicto, sin que Hilda Chiche Duhalde deba batallar demasiado.
3) Para terminar esta carta ultramarina, una sorpresa más. Buenos Aires siempre es sorprendente. Una cronista de Clarín ha participado, e informado detalladamente, de algo que les sorprenderá: "tours" por las villas miseria. Sí, se cobra 60 dólares a los turistas, americanos o europeos, por pasearlos, ya no por las avenidas (la célebre 9 de Julio entre ellas) de la amplísima y hermosa ciudad, sus salas de teatro y sus célebres librerías, sino por los barrios marginales, y hasta por alguna "zona roja". Estos "baños de realidad", que así les llaman, dejan boquiabiertos a los turistas, que se enfrentan a un mundo marginal y sorprendente. No es para menos. El turismo más ramplón, con tal de hacer dinero.
Aquí se le escapa a uno el alma, que es a fin de cuentas lo que parece se está buscando en todo ello, camino de la nada, para que triunfe el tercermundismo y queden en nada los esfuerzos de quienes (porque los hay) han procurado, y siguen procurando, hacer que estas cosas justamente no ocurran, trabajando en favor de una Argentina más rica, con menores carencias, donde la vida sea mejor.