IBEROAMÉRICA
Nicaragua, o el imperio de la ley como caricatura
Carlos Sabino
Con el 38% de los votos emitidos, Daniel Ortega Saavedra, el conocido comandante sandinista que ocupó el poder durante más de 10 años, logró la presidencia de Nicaragua en las elecciones del 5 de noviembre. A pesar de que estuvo muy lejos de alcanzar la mayoría absoluta, Ortega no necesitó de una segunda vuelta: según la reciente reforma constitucional, que entraba en vigor en dichos comicios, el candidato más votado puede ser proclamado vencedor si obtiene más del 40% de las papeletas o si cuenta con menos aún, apenas un 35%, pero aventaja en cinco o más puntos porcentuales a su inmediato perseguidor. Extraños estos números, ¿verdad?