L D (EFE) Mendiluce quiso comprobar las carencias que las tres organizaciones denunciaron en la atención a este colectivo y visitó el centro de acogida de menores Fuerte de la Purísima de Melilla, tras lo que afirmó en conferencia de prensa que "es una vergüenza como está, son instalaciones como calabozos". Añadió que "no corresponde a la dignidad que merece la atención a los menores" y criticó su lejanía de la zona centro de la ciudad, lo que, dijo, favorece la "desintegración" de los alrededor de 40 adolescentes que viven en él.
También dudó de la capacidad del personal del Centro Unesco de Melilla, al que desvinculó de las Naciones Unidas, para gestionar el Fuerte de la Purísima y el centro de reforma Baluarte de San Pedro y defendió que los menores extranjeros requieren una atención "mucho más especializada y que el objetivo no sea apartarlos sino romper el aislamiento psicológico que agrava las conductas conflictivas que algunos puedan tener".
El eurodiputado y escritor visitó además el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) y aunque destacó que su infraestructura y la atención que reciben los acogidos son "bastante ejemplares" criticó que éstos "no tengan tránsito, ni a la península ni siquiera por la vía de la expulsión, debido a una desidia administrativa que puede originar problemas graves".
De la situación de ambos colectivos responsabilizó al Gobierno melillense, al central y a la Unión Europea y acusó a sus responsables de "criminalizar" a quienes en realidad son "víctimas de la mala gestión, la incompetencia, la mala voluntad o todo ello combinado", y anunció que trasladará las deficiencias que ha descubierto al Parlamento Europeo.
También dudó de la capacidad del personal del Centro Unesco de Melilla, al que desvinculó de las Naciones Unidas, para gestionar el Fuerte de la Purísima y el centro de reforma Baluarte de San Pedro y defendió que los menores extranjeros requieren una atención "mucho más especializada y que el objetivo no sea apartarlos sino romper el aislamiento psicológico que agrava las conductas conflictivas que algunos puedan tener".
El eurodiputado y escritor visitó además el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) y aunque destacó que su infraestructura y la atención que reciben los acogidos son "bastante ejemplares" criticó que éstos "no tengan tránsito, ni a la península ni siquiera por la vía de la expulsión, debido a una desidia administrativa que puede originar problemas graves".
De la situación de ambos colectivos responsabilizó al Gobierno melillense, al central y a la Unión Europea y acusó a sus responsables de "criminalizar" a quienes en realidad son "víctimas de la mala gestión, la incompetencia, la mala voluntad o todo ello combinado", y anunció que trasladará las deficiencias que ha descubierto al Parlamento Europeo.