Diálogo con José María Marco

Este diálogo con José María Marco tuvo lugar el viernes 27 de abril entre las 17 y las 18 horas.

Buenas tardes a todos

Puestos a elegir, mejor el PP. LIBERTAD DIGITAL no lo es. La Razón no lo es. De los demás... no se me ocurre ninguna otra excepción. Todos padecen la misma enfermedad. Volvemos a lo mismo. Los de LIBERTAD DIGITAL defienden la libertad. Los demás han hecho del antiamericanismo una bandera. Muy poco liberal hasta que llegó Aznar, y ahora con un flanco democristiano un poco peligroso. Pero es una derecha unida en un partido sólido, nacional y democrático. Eso es lo importante. 1) En Estados Unidos hay que trabajar duro para salir adelante. Pero es verdad que el trabajo suele dar los resultados que uno quiere.  2) El español tiene un futuro gigantesco en USA. Las cifras cantan. Es un patrimonio que no se va a perder. Irá a más. 3) Demócratas: Hillary y Obama. Republicanos: Giuliani o Romney. Pero aquí el campo está todavía muy abierto. En el PP hay bastantes liberales. Pero queda mucho por hacer. La derecha europea debe darse cuenta de que la libertad es su auténtico signo de identidad. 1) No pude ver el debate. ¿Cuál le gustó más a usted? 2) Sigue siendo decisiva, pero internet ya fue muy importante en el 2004, y lo volverá a ser. 3) Mi candidato, por ahora, es Giuliani. Un líder de verdad, popular y con experiencia. Lo está haciendo bien con los evangélicos.  Sin duda. A veces los norteamericanos parecen un poco arrogantes, pero una de sus características sigue siendo la curiosidad. Sigue siendo el país de las oportunidades. Por resentimiento: los europeos siguen añorando el tiempo en que fueron la gran potencia. El antiamericanismo es una enfermedad muy extendida. Además, después del desplome del comunismo, se ha convertido en el enemigo a batir. Pero no creo que los españoles sean tan antiamericanos como dicen las encuestas. Hay muchos. Mucha gente quedó defraudada por la izquierda hace mucho tiempo. Y estoy seguro de que habrá cada vez más. Hay neocon de muy atrás. Gente antifranquista y de extrema izquierda que ahora es liberal o conservadora. También hay gente que se identifica con las ideas de los neocon de lucha contra el terrorismo. Por ejemplo, la gente del GEES. Bush nunca ha sido un liberal clásico. Lo importante, creo yo, es que ha introducido la moral en el debate político. A causa del terrorismo. Esa será la gran aportación de su mandato. Sería catastrófico. Los países europeos no se pueden defender ante el terrorismo islámico. Y las potencias que parecía que se iban a democratizar, es decir Rusia y China, no lo están haciendo. Europa se quedaría colgando. Si hubiera un poco de sensatez, la OTAN debería convertirse en el gran insrumetno de defensa de la democracia. Tal como van las cosas, Estados Unidos se puede quedar solo y ceder a la tentación asilacionista. Ya lo hizo después de la Primera Guerra Mundial, y sabemos lo que ocurrió. Pero los países europeos parece que están volviendo al sentido común: Merkel, Sarkozy (si sale) y Gran Bretaña son un núcleo potente. Buena definición. Son al mismo tiempo liberales en lo económico, conservadores en lo moral y nada complacientes con el totalitarismo islámico. Por desgracia, no. Pero el problema no es el orgullo nacional, es decir las naciones, sino el intervencionismo europeo. En buena medida, y con otras palabras, es la propuesta de reforma de la OTAN que hizo Aznar. La OTAN se hizo para defender la democracia, y debería seguir cumpliendo su papel. Las dos cosas. Y miedo a la libertad, sobre todo. La que une liberalismo económico y cierto grado de conservadurismo moral. Gore ha decidido que el "cambio climático" es un buen tema político. No sé si lo hace por cálculo electoral. Pero sigue en el candelero. Los medios no suelen opinar sobre África por desconocimiento. Es una muestra más de la escasa importancia que los progresistas dan a la libertad. Giuliani-Rice, sin duda. Un éxito casi seguro. McCain, además, ya es mayor para ser vicepresidente. Porque la izquierda progresista cree que la democracia no es un fin en sí misma, sino un medio para cambiar la sociedad. Así, la democracia se convierte en un peligro para la democracia. Tocqueville lo vio bien en La democracia en América. Conviene releerlo. Muchas gracias a todos por su interés. Ha sido un auténtico privilegio charlar con ustedes.