La todavía actriz asistió como invitada de honor a la presentación de las nuevas aplicaciones de la Blackberry donde confesó que no le dan ningún miedo los mensajes. Afirma no tener nada que ocultar a nadie y ni mucho menos a su novio, el anticuario Manuel Vittorio, con el que piensa casarse el próximo mes de septiembre.
Marisa confesó que su vida ha dado un giro total desde que conoció a su futuro marido y que está dispuesta a sacrificar su carrera de actriz y apostar por una vida familiar más tranquila. Prefiere plantearse un futuro rodeada de niños como ha sido habitual en su familia. "Mis padres llevan casi cuarenta años casados y yo quiero seguir el mismo camino, ya me confundí una vez con mi primer matrimonio y espero que éste sea el definitivo", dijo.
Reconoció que a su novio no le gusta su profesión No soportaría ver una película donde tuvieran que besar a su chica. A pesar de lo bien que le que le ha ido en Italia donde la llaman la "Sofía Loren Española", contó que acaba de terminar la segunda entrega de una serie que lleva por titulo Distrito de policía y que todavía le falta la tercera parte. Como haya alguna escena de besos su novio se negará a verla con lo poco que le gustan esas escenas y mucho menos que lo tenga que hacer su novia.
Respecto a Manuel confesó que uno de los motivos por lo que la conquistó es que le recordaba mucho a su padre y reconoció que "me da mucho cariño, y todo lo que hace es de verdad". "Siempre me ve guapa aunque no esté arreglada y haya engordado ocho kilos", comentaba entre risas.
La sevillana tiene pensado continuar en el mundo de la publicidad pero los platós y las cámaras las abandonará en breve por amor". "El mundo de la interpretación me gusta, pero tengo 31 años y antepongo mi vocación de actriz y apuesto por mi vida personal". Como su novio es anticuario y tiene su negocio en el famoso Rasto de Madrid no seria de extrañar ver a ‘La Jara’ vender los bolsos que ella misma diseña en un puesto al lado de su marido. "Son preciosos, los hago yo misma a mano con cristal de Swarosvki. Son muy elegantes de noche y me va muy bien y vendo muchos por lo que no tendré otro remedio que contratar a dos chinas para que me ayuden", comentó con gran sentido del humor.
Cuando se le pregunta por su anterior marido, Chente Escribano, con el que estuvo casada poco más de dos años, siempre responde lo mismo, "Nunca hablo de esa persona, y no tenemos contacto alguno",
Marisa Jara, hace tan solo unos meses que conoció a Manuel, el hombre que se va a convertir en un tiempo record en su segundo marido, esperemos que esta ocasión sea la definitiva y consiga dar en la diana.