Comunidad de Madrid: qué gusto vivir aquí

El hecho de formar parte de la candidatura de Isabel Díaz Ayuso supone un nuevo e interesantísimo reto, que me ha llevado a pensar en cómo y por qué aterricé en Madrid hace ahora 8 años para incorporarme al gobierno de la CM con Esperanza Aguirre.

Nunca podré agradecer lo suficiente la oportunidad que se me brindó en aquellos momentos. Después de 4 años siendo alcaldesa de un pueblo batasunizado hasta la médula, Lizarza, cuatro años que ponían el punto y final a otros muchos dedicados en cuerpo y alma a defender la libertad en el País Vasco bien en el ayuntamiento de Éibar o bien desde las Juntas generales de Guipúzcoa, la llegada a Madrid supuso reaprender a vivir como una ciudadana más, reaprender a vivir sin amenazas, sin mirar hacia atrás, sin escolta etc.

A vivir la vida libremente. Muchos madrileños pueden imaginar lo que pudo suponer pero serán, sin lugar a dudas, los miles de vascos que tuvieron que abandonar esa comunidad vasca escapando de una muerte anunciada en la mayoría de los casos, los que me comprendan realmente.

8 años de plena libertad y dedicada a trabajar con el objetivo de conseguir la reinserción de los menores infractores. Lo que se consigue contando con buenos profesionales como lo hace la Agencia para la Reeducación y Reinserción del menor infractor de la Comunidad de Madrid.

8 años aprovechando la oferta cultural que la comunidad pone a nuestra disposición; utilizando unas infraestructuras de transporte privilegiadas y unos servicios públicos de contrastada calidad sin, por ello, tener que exprimir a los ciudadanos con altos impuestos como desgraciadamente ocurre en otras Comunidades Autónomas.

Todo ello ha sido posible porque la Comunidad de Madrid gobernada por el PP se ha caracterizado por su apertura hacia un mejor futuro, por la defensa de la libertad de todos y cada uno de sus ciudadanos, y porque además es solidaria con aquellos que más lo necesitan. Así lo hemos sentido los que vinimos huyendo del País Vasco por defender la España constitucional.

Madrid, nos abrió los brazos al igual que lo hace ahora con los catalanes que se ven obligados a huir de Cataluña por los independentistas, al igual que con los venezolanos que huyen del dictador. Todos nos encontramos en esta casa común y lo seguiremos haciendo cuando una nueva pero valiente, veraz y digna candidata a la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso sea la presidenta de todos los madrileños.

Hay ilusión, hay juventud, hay audacia, hay renovación, hay veteranía; pero también y, por encima de todo lo demás, hay ideas y programa para colocar a la persona, a ti, como centro de su trabajo.