Como veo que mi comentario de anoche no sale, no sé si por censura o no, insisto:
El telepredicador, que al principio de esta serie tenía planificada otra cosa, visto el derrotero que llevaba, ha decidido "apretar el botón del pánico" y acabar con el combate virtual que estaba perdiendo clarísimamente.
Esto ha sido el parto de los montes. Con un matiz añadido, el prestigio del telepredicador, ganado durante años medrando a la sombra de las manos que le dieron de comer y a las que tan rabiosamente ha mordido ahora, está por los suelos. Y LD no ha salido bien parada de esta experiencia, en mi opinión.
Esperemos que la próxima vez lo piensen todos dos veces antes de hacer el ridículo de esa manera.
Vale.
Pues no sabe el sueño que tengo yo, después de leer esta serie de artículos...
ZZZZZZZZZZZ.
No me puedo creer tanta inquina contra los artículos de César Vidal por el mero hecho de que es protestante. Ahora resulta que San Agustín, etc. son patrimonio del catolicismo cuando la reforma protestante se produjo varios siglos después. Y ya el colmo me parece la igualdad protestantismo=violencia armada del comentario de Zazou, quien por cierto quizás recuerde que los Kennedy son una familia profundamente católica y no por ello ejemplo especial de virtudes como la continencia o el rechazo a la respuesta armada. Yendo por delante mi rechazo a todas las religiones (por lo que suponen de sumisión a unos dogmas irracionales) encuentro menos ofensivo para la libertad humana el evangelismo que el catolicismo, el judaísmo o que, desde luego, el islam.
Zzzzz...
De aqui al Cesaropapismo,solo hay un paso.
Qué hermoso sueño, don César. Qué España tan cristiana, digna, envidia de naciones y baluarte de la Verdad, el Camino y la Vida hubiera sido España de haberse acogido al cristianismo de los primeros cristianos y no a la herejía papista.
Sin embargo ese sueño nunca se cumplirá, pues ya viene Cristo a juzgar al mundo y a sus pecados, y España va a sufrir mucho, muchísimo por sus faltas y abominaciones, por sus crímenes y su laxitud. El último de los días está muy cercano y a los españoles les queda muy poco para renacer en Cristo. A unos pocos les podremos hablar de la verdad de la Biblia y la necesidad de la conversión, pero pocos obtendrán la gracia. Sin embargo un solo pecador que viene a la casa del Padre será suficiente para que la fiesta sea magnífica.
Va a ser triste ser arrebatada y ver tan pocos españoles conmigo en el Paraíso. Pero esta ha sido la lección de esta nación que ha rechazado la Palabra de Cristo y la ha sustituído por la corrupción del Anticristo romano y la Bestia de Moscú.
Bendiciones a los cristianos verdaderos, la gracia permanezca con ustedes.
Muchas felicidades D. César. Pocas veces he estado tanto de acuerdo con
nadie como lo estoy con sus magníficos artículos.
Yo deseo lo mismo que Ud. para nuestra querida España pero me temo que
nos costará mucho tiempo conseguirlo. Una prueba los comentarios
que hay por aquí donde no se admiten críticas a " la única y verdadera".
Siga por este camino y cuente con mi admiración y la de muchas personas
que deseamos para nuestros hijos una España como la Ud. sueña.
(y 2)
Para todos aquellos que quieran seguir afirmando que donde triunfó la reforma, no hubo problemas, me permito recordar como un pastor congregacionista (protestante), tuvo que idear los "Trenes de los Huérfanos", para poder insertar en la sociedad a una serie de niños que vagaban en Nueva York, conocidos por la policía como las "Ratas de la Calle", y que se dedicaban a la delincuencia y podían llegar a formar parte de esas bandas que se llamaban gangs y que dieron origen a la palabra "Ganster".
En el siglo XIX muchas iglesias reformadas vieron que practicar la Caridad podría aliviar la situación de muchos pobres, en lugar de dejar que se muriesen como la protagonista del cuento de Andersen “La Vendedora de Cerillas”, sencillamente "porque se lo merecían". Es aquí donde entra en acción el reverendo Charles Loring Brace y sus trenes. Para el que esté interesado en este personaje, puede ver el enlace http://www.socialwelfarehistory.com/people/brace-c... y enterarse de cómo en esa sociedad donde supuestamente se podía alcanzar el “Sueño Americano”, ya que el tema va de sueños, algunas personas no católicas consideraban que había que ayudar un poco a las personas para ponerlas en condiciones de alcanzar dicho sueño.
Dice Vidal:
"Sueño en una nación llamada España donde el trabajo sea contemplado no como un castigo de Dios del que huir sino como una oportunidad para ser plenamente humanos unida a nuestra naturaleza desde el principio."
Bueno, vagos y vagabundos hay en todas partes. Incluso si uno quiere buscar a un andaluz vago, lo puede hacer yendo a la biografía de Jose María Blanco Withe, como ya expliqué.
Supongo que nadie pretenderá que aquellos famosos vagabundos que durante la Gran Depresión montaban ilegalmente en los trenes de mercancías que surcaban los Estados Unidos de costa a costa eran todos vagos católicos. Creo que no será demasiado difícil para el que lo quiera, investigar a estos vagabundos, ya presentes después de la Guerra de Secesión, notablemente incrementados en la depresión de 1929, y todavía hoy presentes, cuyo testimonio no es difícil de hallar en tantas películas, documentales e incluso artículos de prensa.
A estas alturas debería ser ocioso recordar los ejemplos de Don Bosco, el "Ora et Labora" de los benedictinos. La acción de San Martín de Porres enseñando a los huérfanos un oficio en el Asilo-Hospital de la Santa Cruz, para demostrar que el trabajo ha sido algo apreciado por los católicos y por la Iglesia Católica. Ejemplos que son solo un botón de muestra.
Y yo tengo sueño. Es Ud. soporífero D. César.