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Más sobre la dichosa cultura

La curiosidad es lo propio del científico y, en general, de la persona culta. La curiosidad es la búsqueda de la respuesta a los porqués fundamentales. El curioso pertinente es el que no se satisface con las explicaciones usuales.

paserifo dijo el día 6 de Diciembre de 2011 a las 18:00:

Hug en español significa abrazo. Es chocante que alguien con un nombre así pueda ser tan arisco.

Por otra parte, en realidad no existe mérito en predecir el futuro. Lo más probable, es obtener demérito, porque es muy fácil fallar en las predicciones. Y de acertar, se obtiene un prestigio venenoso: parece envidiable, pero en realidad es un lastre. Al que acierta una vez, le piden que acierte la próxima y la próxima. Y si falla, el resultado es peor que el que experimenta aquel que no acertó una sola vez.

Conviene prevenir, mas es malo actuar como si los peores augurios ya se hubieran hecho realidad.

La curiosidad es cualidad de personas inconformistas. Los jóvenes que no sienten curiosidad no van a aprender nada útil. No existe aprendizaje sin curiosidad. Sin esta virtud sólo puede haber enseñanza superficial y forzada. Fracaso al canto.

La cultura es harina de otro costal. Es algo que se acumula con el paso del tiempo y se comparte con otros. Pero la cultura no es sabiduría. Podría argüirse que la cultura son las ropas de la sabiduría, pero también hemos visto sabidurías desnudas y descalzas. Y también abundan elegantes cabezas huecas, más vacías que las arcas de decenas de bancos. Y en no pocos departamentos universitarios, hay profesores con la llena de aire. Y no parece que los alumnos se quejen mucho.

Lo que no sé es para qué existe el ministerio de cultura. La cultura no es algo que necesite dirección, reglamentos, protección o fomento. Las cosas que no merecen ser conservadas dificultan la aparición y desarrollo de otras nuevas. Y las que sí hay que conservar pueden ser inutilizadas y hasta destruidas si se cuidan mal.