Cada cual elige a sus amistades peligrosas. ETA acaba de cambiar la guerra por otros medios. Con la sonrisa cínica de Zapatero. ¿Es el nuevo 11-M que esperaban ante la crónica de una derrota anunciada…?
Antonio Robles
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Vendeano dijo el día 21 de Octubre de 2011 a las 14:58:
Excelente análisis, Antonio (me permito tutearle porque ya intercambiamos un correo...). El sentido de estado exige esa racionalidad, hay que transcender como Vd. dice de la subjetividad, pues hemos de construir y sostener acto a acto algo interpersonal más duradero que nosotros mismos: una institución, el estado de derecho nada menos. Un acierto su recuerdo de la frase "la guerra con otros medios", pues no puede haber más que un estado de guerra con aquellos que no comparten los dioses de la ciudad, a saber, estado de derecho, respeto a la soberanía nacional, compromiso a no usar la violencia ni a amenazar con ella, reconocimiento político del otro, responsabilidad de los actos cometidos contra las leyes y contra el prójimo...
No ha citado Vd. al "lider de la oposición" en su P.D., quizá aún no había abierto la boca por entonces. Mejor que no lo hubiera hecho, porque ya nos imaginábamos muchos la indignidad que iba a cometer. Con razón habla Vd. de los recogenueces, y de cómo es fácil perdonar los medios cuando se comparten fines. Aplicando el principio, ¿cuáles son los fines compartidos por el Sr. "lider" de la oposición" con estos mafiosos? Pregunta ociosa: son socios, mantienen el mismo chiringuito.
Excelente análisis, Antonio (me permito tutearle porque ya intercambiamos un correo...). El sentido de estado exige esa racionalidad, hay que transcender como Vd. dice de la subjetividad, pues hemos de construir y sostener acto a acto algo interpersonal más duradero que nosotros mismos: una institución, el estado de derecho nada menos. Un acierto su recuerdo de la frase "la guerra con otros medios", pues no puede haber más que un estado de guerra con aquellos que no comparten los dioses de la ciudad, a saber, estado de derecho, respeto a la soberanía nacional, compromiso a no usar la violencia ni a amenazar con ella, reconocimiento político del otro, responsabilidad de los actos cometidos contra las leyes y contra el prójimo...
No ha citado Vd. al "lider de la oposición" en su P.D., quizá aún no había abierto la boca por entonces. Mejor que no lo hubiera hecho, porque ya nos imaginábamos muchos la indignidad que iba a cometer. Con razón habla Vd. de los recogenueces, y de cómo es fácil perdonar los medios cuando se comparten fines. Aplicando el principio, ¿cuáles son los fines compartidos por el Sr. "lider" de la oposición" con estos mafiosos? Pregunta ociosa: son socios, mantienen el mismo chiringuito.