No hay que estar tan depre: tenemos a los escritores británicos y norteamericanos.
Aquí: cocineros y futbolistas.
Es de lo que entienden las editoriales, la prensa y "el mundo cultural español".
No hay que estar tan depre: tenemos a los escritores británicos y norteamericanos.
Aquí: cocineros y futbolistas.
Es de lo que entienden las editoriales, la prensa y "el mundo cultural español".
Es curioso que actualmente muchos se asombran del deterioro de la cultura y la ordinariez que lo ha sustituido. Pocos se detienen a meditar sobre sus causas. Para los que aquellos años anteriores a esta supuesta “democracia” todo era manifiestamente empeorable, no existe lugar hoy a sorpresa alguna. Aquella profusión de vida y cultura fueron consecuencia de un régimen hoy denostado con tanta ignorancia como desvergüenza. Mientras que lo que hoy padecemos es la consecuencia de aquello que nació ya viciado y corrompido en 1978, enfermo por el veneno separatista y de los numerosos enemigos de España y la Cristiandad. Eso sí, sabiamente escondido. Hoy muchos comienzan a darse cuenta (negación de España, ataques a la Iglesia, ataques al Ejército, quema de banderas y desprecio a las leyes, burricie educativo-cultural…) pero aún habrá que padecer bastante más. Para mí –por ejemplo-, el panorama actual es como asistir a una aburrida película cuyo argumento y desenlace ya conozco desde hace muchos años.