Hace muchos años que en España estamos inmersos en una ofensiva laicista y laizante, a la que no hemos sabido hacer frente los católicos, y que ha impregnado una parte de nuestra Iglesia.
Juan Morote
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Pitufito dijo el día 16 de Marzo de 2011 a las 21:02:
No es cierto que estemos en una ofensiva laicista y laizante, el PSOE no busca nada de eso, busca imponer su ideología de género como la religión obligatoria y oficial y para ello se permite aliarse con el islam para acabar con la religión católica.
Si fuese de verdad laicista ya habríamos conocido de encontronazos del poder socialista con el Islam, y no se han dado, salvo supuestas prohibiciones del burka que no están llegando a ningún lado.
Las acciones que se llevan a cabo son las típicas de toda ideología totalitaria, eliminación de la competencia y uso del poder para la imposición de la religión socialista, educación para la cidadanía, ingeniería social mediante legislación sectaria y contraria a las libertades y derechos fundamentales. Destrucción de los controles democráticos con la politización de la justicia, eliminación de la acción popular, control férreo de la fiscalía, integración del poder ejecutivo y legislativo con el partido, etc.
Todo ello aderazado de formaciones paramilitares como los antisistemas, que obtienen subvenciones y mucho cariño de las supuestas autoridades.
No se trata de hacer agnóstica o atea a la sociedad o de esconder la religión de la vida pública, se trata de que crean en la religión socialista y sea la única legal y oficial.
No es cierto que estemos en una ofensiva laicista y laizante, el PSOE no busca nada de eso, busca imponer su ideología de género como la religión obligatoria y oficial y para ello se permite aliarse con el islam para acabar con la religión católica.
Si fuese de verdad laicista ya habríamos conocido de encontronazos del poder socialista con el Islam, y no se han dado, salvo supuestas prohibiciones del burka que no están llegando a ningún lado.
Las acciones que se llevan a cabo son las típicas de toda ideología totalitaria, eliminación de la competencia y uso del poder para la imposición de la religión socialista, educación para la cidadanía, ingeniería social mediante legislación sectaria y contraria a las libertades y derechos fundamentales. Destrucción de los controles democráticos con la politización de la justicia, eliminación de la acción popular, control férreo de la fiscalía, integración del poder ejecutivo y legislativo con el partido, etc.
Todo ello aderazado de formaciones paramilitares como los antisistemas, que obtienen subvenciones y mucho cariño de las supuestas autoridades.
No se trata de hacer agnóstica o atea a la sociedad o de esconder la religión de la vida pública, se trata de que crean en la religión socialista y sea la única legal y oficial.