Sería interesante explorar las consecuencias de la aparición de uno (o varios) sistemas de dominios alternativos. Yo no tengo nada claro que fuese nada catastrófico y, desde luego, sería técnicamente irrelevante, resuelto el problema de las posibles colisiones entre espacios de nombres (¿dominios de 1er nivel numéricos?... es una idea).
Otra cuestión diferente y quizás mucho más peligrosa sería la asignación descoordinada de direcciones IP... aunque con IPV6, con direcciones para todo el universo, sólo hábría problemas en caso de mala fe... y algunos utópicos _pensamos_ que el propio sistema buscaría, _tal vez_, la forma de eliminar los vándalos de este tipo.
Cierto. En EEUU funcionan muy bien los llamados "lobbies", grupos organizados y financiados por industrias o grupos empresariales, que se dedican a motivar, pagar, corromper y obligar a políticos que toman decisiones.