Don Pío: No puedo sino estar de acuerdo con usted en la esencia del artículo. Ahora bien, esos entes descerebrados que aceptaron la concesión de privilegios -leyes privadas- a grupos -de residentes en ciertas zonas-, sin prever la película del absurdo realismo que nos hemos visto obligados a contemplar estos treinta y cinco últimos años, film que tiene animus y vocación de seguir eternamente en el cartel ibérico, y que hunde sus irracionales raices en las paridas de cierto infraescritor llamado Sabino Arana, el cual nutre sus "creaciones" en la miseria moral del tanden Alfonso XII-Cánovas, que "generosamente" humillaron a los que habían luchado por ellos con la concesión del "cupo" (=pufo) tras la derrota total carlista en 1876; insólito hecho que fundamenta su existencia en la "bondad" de Espartero al premiar y acoger a los derrotados por "rendirse" --leáse traicionar a su rey--.
Ahí no empieza el protagonismo de los descerebrados, como usted sabe mucho mejor que yo, hay antecedentes en la Historia, que explican, pero de ningún modo justifican los atentados a la lógica recogidos en la Constitución de 1978, sin los cuales esta pésima película del neorrealismo celtibérico ya habría acabado hace tiempo.
Los nacionalismos creados con las enormes cantidades de recursos drenadas de los españoles, y cuyo objetivo es mantener o incrementar los mecanismos de succión para seguir conservando el pingüe negocio ad aeternum, solo son rentables mientras España siga esquilmando a sus hijos para alimentar esas bastardías orgullosas de sus listezas y capacidades de engañar y comprar representantes de tontos. Yo solo veo una solución para desatar el nudo: cortarlo de raíz, lo que significa mandar al cuerno a toda esa gentuza, así, España, podría, entre otras cosas, recuperar el lenguaje -no más Goebbels-, la navaja de Occam, entre otras cosas indispensables para ser.
Señala certeramente don Pío una evidencia que habría que repetir hasta la saciedad: el estado autonómico es impensable sin la sombra de ETA. Tamaño disparate no figuró nunca entre las pretensiones de la mayoría de españoles durante el franquismo y hubo que necesitar a un Suárez para llevar a cabo el error de conceder el máximo de competencias a unos tahúres políticos con la vaga y difusa promesa de su lealtad constitucional, cosa que nunca ocurrió.
Debería habilitarse un Nuremberg español para que dieran cuentas la pléyade de políticos y comunicadores que durante decenios loaron las virtutes de este desbarajuste y contribuyeron, por acción u omisión a este absurdo.
Al menos dos comentarios sí que ha habido., pero no los publicáis.
Objetivamente hablando, vuelve Vd. a tener toda la razón.
E insisto, fíjese en la trayectoria "intelectual" de estos chicos (corta como un viaje al recibidor), sus espléndidas faltas de ortografía, su acrítica repetición de mantras. Vd. mismo - aquien siempre sigo con interé- en otro tiempo se dejó engañar por sandeces de ese calibre, pero era otra época y fue capaz de advertir qué clase de tonterías eran en el fondo. Es difícil creer que alguien medianamente listo pueda ser etarra.
Discrepo totalmente de este análisis. Creo que los de la ETA son verdaderos descerebrados en una proporción equivalente s su acendrada cobradía. No me parece que una ideología tan idiota, basada en la repetición de tópicos idiotas de los sesenta pueda ser sustentada por otro que no sea un descerebrado. Problema distinto es que unos descerebrados puedan medrar a costa de la frivolidad, bajeza moral u oportunismo de algunos gobernantes, pero eso de por sí no les confiere cerebro. Tampoco me atrevería a asignar las tres motivaciones -frivolidad, bajeza moral y oportunismo- a todos los que han resultado engañados. Algunos las merecerían las tres, como es el caso de Zapatero, pero insisto en que no es tan claro en otros casos.
¿Descerebrados los etarras? Hay que tener una astucia maquiavélica y una comprensión muy aguda de la sociedad española para asesinar justo la víspera de la jornada de reflexión a un ex concejal socialista (Isaias Carrasco) y propiciar de esta manera una masiva partipación electoral favorable al PSOE, que es a quien ETA quiere en el poder. Luego supimos que detras de esta decisión pudo estar un tal apodado "Thierry", un cincuentón de colmillo retorcido.
Porque junto a los niñatos imberbes que parecen estar al frente, hay una serie de cuarentones y cincuentones (Otegui, Usabiaba), en la retaguardia, en el aparato político, o incluso refugiados en Venezuela, que participan en las decisiones y en la estrategia, y que no son precisamente "blandos" como nos los quieren pintar el gobierno, sino muy listos, muy experimentados y muy conocedores de la blandengue y cobarde sociedad española.
Pío, hay que situar un buen lugar en la lista de descerebrados al actual lehendakari: el de la integración en democracia de los totalitarios de la ETA-Batasuna, y el de la paz sin vencedores ni vencidos. Y hay que excluir expresamente de la lista al PNV, recolector de nueces. Muy conforme estoy con situar en el primer lugar de la relación a nuestro presidente del Gobierno. Sólo una pequeña objeción provisional y personal a su tesis: todavía soy de los que creen o, mejor, esperan que el nacionalismo se cura viajando o leyendo; ya que entiendo que se debe en buena parte a una malformación educativa, susceptible, aunque difícilmente, de corregirse cuando se abre la mente a otros tiempos y a otros espacios. Seguiré pensándolo. Con afecto.
Otro de los lugares comunes que se solían utilizar en otros tiempos sobre la ETA era lo de "los últimos coletazos". Recuerdo un atentado brutal en la sede de la Telefónica cuando por mi edad yo todavía no me preocupaba por la política, que el mensaje que lanzaba la televisión al dar la noticia era lo de "los últimos coletazos de una bestia moribunda" y recuerdo a mi padre desesperado preguntándose como podían decir eso cuando había dado tal demostración de fuerza. Aquello me abrió los ojos y me hizo ver que los políticos, los que se supone que están ahí porque saben más de cuestiones de estado, eran los principales desorientados en esta cuestión y que para ellos, lo principal no era afrontar las políticas necesarias para solventar el problema sino salvar su imagen en ese momento puntual de conmoción. Una verdadera vergüenza
Aquí a lo que se le debe hacer caso es, que las fuerzas de seguridad pagadas por todos los Españoles,supriman a toda esa banda de delincuentes, chorizos y asesinos, y que sus señorías cuando juraron, prometieron, o por su honor haria hacer cumplir la Constitución Española que la hagan cumplir y se dejen ya de gilipolleces si la banda dice esto o aquello, tiene suerte de que a mi por razones geograficas no me han mutilado, dañado o asesinado a ningún familiar ya que yo si iría a por ellos aunque fuese lo ultimo que hiciese en esta vida, es lamentable que mientras están desgranando al margarita personas honradas se tengan que exiliar de las Vascongadas y que empresarios tengan que pagar extorsiones para poder estar tranquilos de que no hagan daño a sus familiares, mientras otra parte de la sociedad sufre por estos canallas cada vez que salen vestidos de payasos en la TV