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Libertad vigilada

Si alguien quiere regentar un establecimiento donde se advierta previamente tanto a empleados como a clientes que se trata de un local destinado a fumadores, debería poder llevarlo a cabo sin problemas.

ongietor dijo el día 10 de Enero de 2011 a las 20:22:

Problemas técnicos caducos: Con un poco de moderación por parte de los fumadores -que es imprescindible- y un acondicionamiento normal, son -eran- perfectamenta habitables muchísimos ambientes de bar, ya hasta ahora. Decir lo contrario es tener la neurona retrasada a 1980, o 1993.
Problemas sociales actuales: lo público echa a la calle a todo el mundo, y por ahí te pudras: toros: ¡al carrer! fumetón: ¡al carrer! botellón: ¡al carrer! decibelios ¡al carrer! politicastros y paguines: ¡a comer!
Tontos útiles, a aplaudir la "salubridad ambiental" de este gobierno comisionista de la aborción y la terapia conductista.
Y: Toda conducta imprudente daña a todo el mundo: el que se atiza el colesterol, o conduce temerariamente, y luego se queda treinta años semiparalizado, a costa del erario público, genera sufrimiento. Y: Del padecimiento físico y psíquico ocasionado por el ruido musiquero -en las tiendas, en los chinos, en las radios tuneadas de madrugada- por la zafiedad suelta por todas partes, los políticos, con esa piel de cocodrilo que tienen, y los blindajes en que habitan, no se enteran, por lo visto.

Bufabrag dijo el día 8 de Enero de 2011 a las 08:04:

A este ciccioli habrá que aplicarle de manera preventiva la futura Ley Pajín, por insultar, menospreciar y ofender gravemente al colectivo restaurador. Pero si no tenías más que irte a otro bar, fenómeno.

ciccioli dijo el día 7 de Enero de 2011 a las 13:58:

Punto 1.

En un pueblo de la costa californiana si usted se empeña en seguir fumando acababa en comisaría hasta con grilletes en los tobillos y no te sacaba ni Rambo.

Punto 2.

todo el mundo sabe que los dueños de restaurantes y bares no son catedráticos de filosofía ni nada por el estilo. Si hubiesen tenido la inteligencia de crear espacios NORMALES para no fumadores esto no habría pasado.

Punto 3.

Explico el punto 2. un no fumador entraba en un bar a tomarse simplemente un café, una caña o un vaso de agua. Quería pasar al espacio de no fumadores y no le dejaban. ¿Por qué? Pues porque el espacio reservado a no fumadores era el de las mesas para restaurante, allá al fondo y claro, si usted se iba a tomar solo un café, pues en esas magníficas mesas ya preparadas con mantelería, cubertería y vajilla para los comensales no le dejaban. ¿va usted a almorazar?, le preguntaban a uno. "No, yo solo quiero un vaso de agua", y entonces le mandaban a la barra, incluso con un mal gesto, como diciendo "sí que por un vaso de agua vas a ocupar una mesa", Y, mire usted qué casualidad, la barra estaba INFESTADA de fumadores.

Lo dicho, de tener los restauradores un coeficiente intelectual mínimo esto no habría pasado.