Sobre la fenecida firma de auditoria ARTHUR ANDERSEN
En este periódico digital está apareciendo una serie de artículos en los que su autor trata de explicar la desaparición de esa empresa. Pero, me pregunto, el autor ¿trata de explicar o de exculparse?. Veamos.
He sufrido a los "Arturos" durante muchos años. No como "auditores", sino como "consultores". Te venía un crío preguntándote que problemas había y que necesitabas, y poco después te aparecía el Jefe con un documento enviado por “Athur Andersen Consulting” en el que te decían los problemas que habían detectado en tu área y lo que necesitabas según ellos (los “Arturos”), y que no decía más que lo que tu habías dicho.
Pero ¿como conseguían los "Arturos consultores" esos jugosos pedidos que no reportaban nada a la empresa "consulteada"?.
Pues creo que la explicación es muy sencilla, y que ahí está la explicación de lo que posiblemente sucedió con ENRON:
Los "Arturos auditores" firmaban lo que les decían si había pedidos de “consulteo” para los "Arturos consultores".
Lo que nos relatan en esos artículos, creo que más como autojustificación del autor que para que conozcamos la verdad de lo sucedido, es que, al final, los "Arturos consultores" se volvieron locos y creyeron que los pedidos (los “consulteos”) les venían por ser así de majos y no por los enjuagues de los "Arturos auditores".
Y voy a poner un ejemplo fácilmente comprobable:
LA FUSIÓN IBERDUERO-HIDROELÉCTRICA ESPAÑOLA
HE estaba quebrada, situación evitada mediante el truco de ocultar el compromiso del Fondo de Pensiones de los empleados de HE, fondo del que el Presidente Sr. Oriol se llevaba como 1.000 millones de pesetas, compromiso que superaba los 100.000 millones de pesetas de la época y que no figuraba en balances ni estaba provisionado.
TRUCO para ocultarlo a los accionistas de IBERDUERO y a la gente en general:
Dicen que se crea una nueva empresa llamada IBERDROLA, a IBERDUERO se la cambia el nombre y se la denomina IBERDROLA I y a HE también se la cambia el nombre y se la denomina IBERDROLA II. Pero, ¡oh casualidad!, resulta que esa “nueva” empresa IBERDROLA tiene el NIF de IBERDROLA I, que es el mismo que el de IBERDUERO, es decir, que IBERDROLA e IBERDROLA I son en realidad IBERDUERO.
¿Y donde aparece el fondo de pensiones de IBERDROLA II, anteriormente HE?.
Para la Junta General de la Fusión de IBERDOLA I(IBERDUERO) y de IBERDOLA II (Hidroeléctrica Española) se preparan TRES MEMORIAS INDEPENDIENTES. Una de IBERDROLA, otra de IBERDROLA I y otra de IBERDOLA II.
Y en la Memoria de IBERDROLA aparece una notita, fuera del texto general, diciendo que como compromiso con el personal de HE se provisionan 100.000 millones de pesetas, dinero que no aparece en la memoria de HE, en ese momento IBERDROLA II. Ni tampoco en la de IBERDROLA I, es decir, IBERDUERO, que es la que pone la pasta.
¿Y quienes pudieron colaborar en esa chapuza?.
Aparte de algunos de IBERDUERO, tenemos:
ANDERSEN como auditor de ambas empresas.
Banco de Bilbao-Vizcaya, como uno de los principales accionistas de ambas empresas.
Ministerio de Hacienda.
Gobierno Vasco.
Y que todos ellos lo sabían,
Y como intermediarios con el PSOE parece que tenemos a los de sempiternos, Navalón y Feo, y colocados en chollos diversos familiares y afiliados, como un hermano de Solchaga, una hermana de Benegas, y otros por el estilo (¿Qué cargo tiene un tal Navalón en IBERDROLA?).
Me pregunto, ¿estaba el autor de esos artículos en esos chanchulleos?.
¿Firmó esos balances?
Espero que el autor de esos artículos se anime y nos diga que “socios” firmaron esos balances.
Y de paso, que nos diga que es lo que pudieron sacar a cambio.
Si, un articulo interesante. Pero no explica el caso de Enron, etc.
El problema quizas esta en el tamaño. Cualquier gran compañia tiende a "funccionarizarse". En la lucha contra esto El Corte Ingles paga comisiones a sus vendedores, y el IBM intenta de remover su personal geograficamente.
En unas palabras en las grandes compañias crece el rendimiento como un colectivo pero baja a nivel personal.
Animo a alguien con nivel similar a que escriba la crónica de Price Waterhause.
Espero con impaciencia el desenlace.
El reparto de beneficios en este tipo de empresas es tarea muy difícil y mas con las nuevas generaciones de tiburones.
Tan difícil, casi, como poner incentivos a los funcionarios, que aún son mas variopintos y diversos.
Se me quedó en el tintero.
Los chavalitos sin experiencia de los Arturos podían clasificarse, en general, en dos grupos:
a) Los que iban a hacer carrera en Arthur Andersen. Estos eran los buenos.
c) El resto, ósea, la morrallla. A éstos no les despedían, simplemente se los enjaquimaban a las empresas consulteadas como grandes fichajes, con lo cual ya tenían, además, otro estomago agradecido dentro del cliente.