Este inexplicable hecho nos lleva a pedir nuevamente una reforma en el sistema electoral que imposibilite que pequeñas minorías regionales se conviertan en árbitros para la gobernabilidad de toda la nación.
EDITORIAL
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quasimod dijo el día 19 de Octubre de 2010 a las 19:41:
Estamos de acuerdo en que la reforma de la legislación electoral es necesaria. Pero a ninguna de las dos grandes fuerzas políticas sedicentemente nacionales les interesa. Tienen una ocasión de oro ahora, con la pretendida reforma para impedir el acceso de ETA a las instituciones, la información que desde estas se maneja y el dinero que proporcionan.
También pretenden, según andan pregonando por las esquinas que se puedan anular listas "contaminadas"; y expulsar de las corporaciones a los cargos electos pertenecientes a una formación que haya sido declarada ilegal.
¿Por qué no dan un paso mas y establecen un mínmo del 5% del censo nacional, o del total nacional de votos emitidos, para acceder a un escaño en la Carrera de San Jerónimo?
PORQUE NO LES DA LA GANA.
A las cúpulas jerarquizadas y ademocráticas de los grandes partidos no les interesa.
Así que la reforma, el cambio, tendrá que venir por otra vía, o no vendrá.
Estamos de acuerdo en que la reforma de la legislación electoral es necesaria. Pero a ninguna de las dos grandes fuerzas políticas sedicentemente nacionales les interesa. Tienen una ocasión de oro ahora, con la pretendida reforma para impedir el acceso de ETA a las instituciones, la información que desde estas se maneja y el dinero que proporcionan.
También pretenden, según andan pregonando por las esquinas que se puedan anular listas "contaminadas"; y expulsar de las corporaciones a los cargos electos pertenecientes a una formación que haya sido declarada ilegal.
¿Por qué no dan un paso mas y establecen un mínmo del 5% del censo nacional, o del total nacional de votos emitidos, para acceder a un escaño en la Carrera de San Jerónimo?
PORQUE NO LES DA LA GANA.
A las cúpulas jerarquizadas y ademocráticas de los grandes partidos no les interesa.
Así que la reforma, el cambio, tendrá que venir por otra vía, o no vendrá.