Daniel, no seas blandi-blub, hombre.
Hemos de ser conscientes de que los liberales compartimos posiciones ideológicas con radicales que, por ejemplo, están en contra de la propiedad privada. Se puede estar en contra de la SGAE por motivos muy diferentes, y este es el caso.
Que nos intenten relacionar con los socialistas radicales que suelen utilizar esta clase de métodos contra todos y contra todo, no es más que una táctica que cabe esperar de una sociedad de la catadura moral de la SGAE. No debemos preocuparnos por eso, sino "ocuparnos" en rebatir sus argumentos con cordura y firmeza.
Aunque no puedo decir que comparta los métodos de quienes han bloqueado esos sitios, si puedo decir que SGAEs y ministerio se merecen lo que les ha pasado, pues ellos se están dedicando a bloquear cosas mucho más importantes utilizando métodos quasi-mafiosos, aunque generalmente legales, y en connivencia con un gobierno que mira por los intereses "del partido", en lugar de mirar por los intereses de los ciudadanos.
En realidad, todo esto no es más que una pelea entre la misma clase de perros con distintos collares. No seré yo quien salga a defender a una de sus facciones, y creo que tu, Daniel, harías mejor en defender TUS posiciones en lugar de defender a la SGAE, porque, aunque podáis coincidir puntualmente en algo, estáis en bandos radicalmente diferentes. No te preocupes, ellos se defienden muy bien solitos..., mejor que tu, por lo que veo.
Creeme, el "fair play" no funcionará con la SGAE, ni con quienes piensan y actúan como ellos. Te acusarán si no lo usas (tu fair play) o sacarán partido de él en beneficio propio si lo usas, sin ofrecerte nada a cambio.
Ante una decisión en la que ambas opciones son igual de malas, lo mejor que puedes hacer es inventar una tercera: líate la manta a la cabeza y ataca a ambos grupos. No te dediques a salvar al que se presenta como víctima, cuando sabes que se revolverá inmediatamente contra tu mano sin agradecer la ayuda que le has prestado.
En esta clase de situaciones, las ayudas desinteresadas se revuelven contra uno mismo, y sólo sirven para debilitar la propia posición. Cada palo que aguante su vela.
Totalmente de acuerdo contigo, Daniel, como ya dije en mi blog el día del ataque a las webs de la SGAE, del Ministerio de Cultura y de Promusicae. Una cosa es que detestemos a esas entidades y otra cosa muy distinta es que sea legítimo y justificable un ataque DDoS, que como bien apuntas representa un ataque a la libertad y a la propiedad del atacado.
Para desmontar a la SGAE en la red ya tenemos distintos medios con los que amplificar la mejor arma con la que contamos: la palabra. Para hacer ataques informáticos que no cuenten conmigo.
Me parece bien Daniel. Estoy de acuerdo y le agradezco que ponga cordura, pues no pocos estamos furiosos con lo del canon y otras tropelías de la SGAE. No debemos caer en la tentación de machacarlos contra la ley.