Estimado Antonio, disiento con este artículo en diversos aspectos.
Un ataque DoS, Denegación de Servicio, no destruye ningún componente físico del servidor que aloja los sitios web atacados. Tan sólo impide y bloquea el funcionamiento en sí.
Aquí no se ha roto el escaparate de nadie, más bien es como la actuación de un piquete llenando de silicona una cerradura.
Las diferentes acciones y leyes que han ido minando las libertades, o simplemente han sido insultos a toda la población al llamarnos "delincuentes", han ido en progresión, tanto en cantidad como en calidad destructiva. ¿Por qué?. Pues porque el pueblo no se ha defendido, por ellos mismos o por asociaciones. Sólo trataban de "dialogar".
Es por ello, y se lo digo con todo el respeto, que este artículo no llega a la brillantez alcanzada en otras ocasiones, y logra sólo un artículo "políticamente correcto".
(Ahora puede parecer un gran ataque lo que ha sucedido, pero en unos años hablaremos de otros tipos de "ataques" que ni imaginamos a los distintos ministerios y organismos, en pro de nuestras libertades).
Estoy en contra de su opinión, es el derecho de unos internautas y ciudadanos de todo el planeta contra el recorte de libertades que los gobiernos y sus instituciones, sean en mayor o menor medida cercanas a ellos, nos intentan imponer a la fuerza. Esto no es como lanzar cócteles molotov ni romper escaparates, señor Chinchetru, y usted precisamente debería saberlo. No se trata de hackear un sitio y si no que lo tengan previsto, ¿para qué está la seguridad informática? La SGAE utiliza este mismo método contra sitios que ellos consideran piratas; ¿quién es el malvado aquí?